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¿Quién detendrá a Patriotas?

Disputará su noveno Super Bowl, algo que no ha conseguido ningún otro club; Tom Brady protagonizará su séptimo Súper Domingo, hecho que ningún otro jugador ha logrado en NFL


  • 22
  • Enero
    2017

En su temporada de redención, Tom Brady ha conseguido un nuevo viaje al Super Bowl.

Tras comenzar la campaña suspendido cuatro encuentros por el escándalo de los balones desinflados, el quarterback condujo ayer domingo a los Patriotas hacia una victoria aplastante por 36-17 sobre los Acereros de Pittsburgh, para que Nueva Inglaterra impusiera un récord, al avanzar por novena ocasión al gran partido.

Brady disputará el séptimo Super Bowl en su carrera. Lanzó para 384 yardas, la mejor cifra en Playoffs en la historia de la franquicia, incluidos tres envíos de anotación, en lo que fue la séptima Final consecutiva de la Liga Americana disputada por Nueva Inglaterra.

Los Pats son favoritos por tres puntos para derrotar a Atlanta dentro de dos semanas en Houston. Ahí buscarán su quinto título del Super Bowl con Brady como mariscal de campo y con Bill Belichick como entrenador.

La séptima aparición de Belichick en un Súper Domingo representa un récord para cualquier entrenador.

Roger Goodell, el comisionado de la NFL, impuso la suspensión a Brady por el uso de balones inflados a menos presión que la reglamentaria en la Final de la Americana disputada ante Indianápolis en 2015. Sin su quarterback, los Patriots lograron comenzar la temporada con una foja de tres ganados y un perdido. Ya con él, concluyeron con un récord de 16 victorias y dos tropiezos.

Desde el retorno de Brady en la quinta semana de la campaña, la única derrota de Nueva Inglaterra llegó en casa, ante Seattle. Y Brady, de 39 años de edad, tuvo uno de sus mejores años en una carrera que algún día lo catapultará al Salón de La Fama.

Con una baja temperatura, semejante a la que había en aquel polémico partido ante los Colts, Brady siguió cosechando victorias, e hizo añicos a la defensiva secundaria de Pittsburgh.

“Esto es mi motivación acá, todos estos compañeros que están frente a mí, estos chicos”, afirmó Brady, mientras señalaba al resto de los Patriots e ignoraba las menciones sobre el escándalo. “Los chicos aparecieron hoy (ayer) para jugar”.

El principal destinatario de Brady fue Chris Hogan. El receptor, hace poco un desconocido, encontró espacios abiertos en todos los rincones del terreno ante la endeble secundaria.

Hogan atrapó nueve balones para 180 yardas y dos touchdowns.

El otro receptor, Julian Edelman, añadió ocho ovoides capturados para 118 yardas y una anotación. Brady igualó el récord de Joe Montana, con nueve actuaciones de tres pases de touchdown en los playoffs.

Asimismo, Brady consiguió su undécimo partido de postemporada con 300 yardas, mejorando su propio récord de la NFL. Completó 32 de 42 envíos.

“Ganamos de formas muy diferentes y en circunstancias distintas”, resaltó Brady. “La fortaleza de espíritu es lo más importante, y este equipo la tiene. Veremos si podemos escribir un final feliz”.

(Con información de AP)



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