Escena

Live Out empapa de música a regios

Pese a que la lluvia no dejó de caer a lo largo del festival que se llevó a cabo ayer en la ciudad, miles de regiomontanos


  • 20
  • Octubre
    2018

Ni la lluvia ni el lodo fueron impedimento para que los regios vivieran una divertida jornada de mucha música en el festival Live Out.

Desde que las puertas del Parque Fundidora fueron abiertas a las 13:00 horas, la lluvia fue constante pero no suficiente para hacer mella en el ambiente festivo que generaron miles de asistentes.

En los alrededores del parque los vendedores hicieron su agosto con la venta de impermeables, ante la prohibición por seguridad de paraguas, por lo que la multitud lució como un mar de gente multicolor con los atuendos de plástico.

A muchos no les importó mojarse o llenarse de lodo, incluso pareció darle un toque más divertido al espacio y disfrutar de la música electrónica, con la que miles se congregaron y aunque esta área estaba resguardada bajo techo, los asistentes terminaron enlodados hasta las rodillas.

Los DJs Grenda, Callie Reiff y Simihaze, de Tijuana, Nueva York y Palestina, fueron algunos de los artífices de los sonidos electro que enloquecieron a la multitud.

En los escenarios principales, la adrenalina no fue menor gracias a artistas como Mint Field, Slenderbodies, NoMBe, Alma, Belly, Benjamin Booker y Bishop Briggs que consiguieron empapar de emoción con sus canciones al público.

Por momentos la lluvia arreció, pero ni así la atención del público disminuyó como cuando el dueto Marian Hill se adueñó del escenario. Temas como Down y Mistaken, fueron parte de su repertorio. Para cuando el australiano Vance Joy le tocó turno, el cielo tuvo clemencia con los presentes quienes disfrutaron de su icónico sencillo Riptide, entre otros.

Hasta el cierre de esta edición, la cantautora y multiinstrumentista anglosajona St. Vincent, mantenía a tope el espectáculo.

Temas como Sugar Boy, Savior, Masseduction y Marrow, hicieron que el público se uniera en una sola voz.

Los bests electrónicos de Andrew Taggart y Alex Pall, mejor conocidos como The Chainsmokers generaron la locura en el lugar.

A los asistentes ya no les importó el agua y lodo, pues al ritmo de temas como “Everybody Hatea Me”, “Inside Out”,

“Don’t Let Me Down” y “Selfie”, brincaron y bailaron bajo la lluvia que arreció al transcurrir la noche. Eso sí, a pesar de que su cabina se quedó sin sonido inesperadamente, lograron levantar de nuevo el ánimo al echar a andar de nuevo la mezcladora ante el aplauso del público.

Ya cerca de la medianoche llegó quizá el momento más esperado, cuando por el sonido local se escucharon las primeras notas de “Pray For Me”, del canadiense The Weeknd, mientras los gritos de miles de personas se unían en uno sólo.

“¡Que tal Monterrey, México!”, saludó el cantante de 28 años para recibir una fuerte ovación de la multitud.

El cantautor y productor se echó a la bolsa a los fans con “Starboy”, “ Secrets” y “Reminder”, para continuar con “Can’t Feel My Face” y “I Feel It Coming”, entre otros temas que la gran mayoría cantó y bailó en la que fuera la primera visita del artista a la Ciudad.

Pasadas la 1:00 horas, el público comenzó a retirarse para finalmente decir adiós con “The Hills”, entre pirotecnia y la algarabía de la gente.


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