Crece empleo en sector industrial

El sector industrial contribuyó con el 46% de los empleos formales creados en el país durante 2016, a pesar de las dificultades externas e internas que enfrentó, aseguró la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).

En sus balances de cierre de año, el organismo que preside Manuel Herrera Vega detalló que pese a que la economía avanzó a un ritmo menor que en años anteriores, en los primeros 10 meses se crearon 913,921 empleos en el sector formal, cifra superior a los 815,881 puestos de trabajo reportados en el mismo lapso de 2015.

“Iniciativas como el programa de formalización del empleo han contribuido al aumento en el registro de trabajadores ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), mejorando la condición laboral de obreros y empleados”, consideró.

Puntualizó que en el periodo enero-octubre, el sector industrial creó 451,761 puestos de trabajo, equivalentes a 49% del total reportado por el IMSS.

El balance de Concamin puntualizó que al cierre del 2016, con cifras desestacionalizadas e incluyendo los movimientos de altas y bajas ante el IMSS en noviembre y diciembre, se tendrá una generación de alrededor de 690,000 puestos de trabajo en el sector formal de la economía, cifra superior a los 644,000 registrados en 2015.

En este total, la contribución del sector industrial a la generación de oportunidades laborales en la economía formal estará marcada por la creación de 315,000 empleos, equivalentes al 46 por ciento.

Para 2017, la cúpula industrial del país dijo que espera que el sector formal de la economía genere entre 600,000 y 630,000 puestos de trabajo, de los cuales, el sector aportará entre 250,000 y 280,000 empleos, es decir, alrededor de 44% de las oportunidades laborales esperadas.

Concamin advirtió que tanto en el panorama mundial como en el ambiente económico nacional, se presentan resultados contrastantes y la acumulación de nubarrones que anticipan un cierre de año difícil para la actividad productiva.

Aseguró que predominan vientos de desaceleración económica, inestabilidad en los mercados financieros y cautela de consumidores y empresarios, los cuales constituyen los rasgos que defi nen la transición entre este y el siguiente año.

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