Y queda pendiente eliminar aranceles

El sector empresarial nacional coincidió en que la firma del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) que ayer se concretó es un acierto importante en la relación comercial entre los tres países, y que dará ventajas al país; sin embargo, hay tareas pendientes que deben atenderse fuera de este acuerdo.

Un tema prioritario es la eliminación del arancel al acero y aluminio, por parte del gobierno de Estados Unidos, dijo Héctor Villarreal, director de Comce Noreste, en entrevista a El Horizonte.

“Viene la aprobación por parte de los congresos y la revisión en detalle para la implementación de los acuerdos. Básicamente todo se incluyó en el T-MEC en cuanto a los temas. Está pendiente se pueda eliminar el arancel al acero y aluminio, que esperemos se de pronto”, agregó el directivo.

En ese sentido, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón, aseguró que los empresarios mexicanos trabajarán con la próxima administración el tema de los aranceles que Estados Unidos impuso a las exportaciones nacionales de acero y aluminio.

“Vamos a trabajar con la nueva administración, con la secretaria de Economía y la Subsecretaría de Comercio Exterior, lo vamos hacer para encontrar fórmulas de facilitación comercial, lo que hemos logrado es mucho, pero es más importante que resolver lo del acero y aluminio”, apuntó.

Castañón añadió que hay propuestas sobre la mesa para resolver el problema de los aranceles, pero las ofertas que Estados Unidos ha hecho a México no son competitivas y no se han aceptado.

Sostuvo que ante ello están haciendo las contrapropuestas para que la industria mexicana esté en igualdad o mejores condiciones de las que tiene Estados Unidos con otras economías.

“Nosotros seguimos exportando acero y aluminio a Estados Unidos, tenemos condiciones, incluso, preferenciales contra otros países, pero la postura de México es que exista libre comercio de acero y aluminio y que las máximas exportaciones que México ha tenido por lo menos se mantengan con cuotas específicas que sean negociables”, reiteró.

Por su parte, Caintra en Nuevo León subrayó que aunque el T-MEC implica nuevos retos para el sector industrial ante el incremento en las reglas de origen en el sector automotriz y la inclusión de salarios de mayor valor agregado, “estamos convencidos de que estas disposiciones representan también nuevas oportunidades de proveeduría para las pequeñas y medianas empresas, así como una modernización de la industria en el contexto de la Revolución 4.0”.

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