Nadar le salvó la vida y la de 18 personas más: la historia de la nadadora olímpica, Yusra Mardini

El primer encuentro de Yusra Mardini con el mar abierto es una experiencia que jamás podrá olvidar.

Para llegar a la categoría mariposa en las Olimpiadas, tuvo que despedirse junto a su hermana, Sarah, de su amada Siria debido a que fue blanco de guerra cuando ella apenas tenía 18 años, convirtiéndola en una de los 18 refugiados en abordar una embarcación para 6 personas; quienes también buscaban su protección en Grecia por tan difícil situación.

Entre el miedo de abandonar su país a lo desconocido y el no saber si llegaría a salvo a causa de las circunstancias, pasó lo peor: el bote, en el que muy apenas podían mantenerse dentro por el poco espacio, tuvo un fallo en el motor que los dejó a la deriva en el mar Egeo.

Yusra nunca llegó a imaginar que la natación no solo le salvaría la vida, sino que a la de todos los pasajeros que estaban a bordo. Las hermanas Mardini, junto a otros tripulantes, nadaron por más de tres horas con la esperanza de salir de tan nublado panorama.

Aunque la nadadora olímpica tenía signos de hipotermia, empujó a la embarcación con todas sus fuerzas hasta llegar a la Costa de Lesbos y, al fin, poder descansar de tan agotador y peligroso viaje.

Ahora, como un buen karma, tuvo la oportunidad de estar en las Olimpiadas Tokyo 2020 en el deporte que le salvó la vida y la de los otros refugiados que lograron llegar a salvo por tan aventurada acción: la natación.

Comentarios