Ebrios se agarran a balazos durante noche de copas

Elementos de las fuerza policiales de Arkansas realizaron la detención de dos individuos en estado de ebriedad que estaban disparándose entre si mientras portaban un chaleco antibalas.

El par de amigos comenzaron a beber y uno de ellos se percató de que el otro portaba un chaleco antibalas, fue a raíz, de ahí que tras unas cuantas cervezas que durante la conversación surgió la duda de: ¿qué se sentirá recibir un disparo al portar un chaleco antibalas?

Fue entonces que uno de los dos tipos le pidió a su amigo que le disparara en el pecho, sin embargo, el fuerte dolor que provocó el impacto del proyectil desató su furia, motivo por el cual le solicitó a su compinche que se pusiera el chaleco para que él también viera lo que se siente. Sin embargo, lo que ninguno de los dos se imaginó es que el fuerte estruendo de la pistola alertaría a sus vecinos quienes no vacilaron en llamar a la policía.

Al arribo de las fuerzas del orden, los sujetos optaron por dar otra versión de los hechos, uno de ellos afirmaba ser una especie de custodio o mercenario, el cual había sido contratado por 200 dólares para proteger un paquete. Según él los disparos los recibió mientras se disponía a proteger 'el activo'.

Sin embargo, como era de esperarse, los policías no le creyeron ni una sola palabra. Fue así como ambos personajes fueron llevados al departamento de policía.

En el lugar y al verse presionado por su esposa, uno de los dos involucrados decidió decir la verdad.

Ambos llevan tras las rejas desde el pasado 31 de marzo y se les investiga con el fin de comprobar su culpabilidad en el delito de agresión agravada. De ser declarados culpables, podrían enfrentar hasta 6 años de prisión con una multa de 10 mil dólares. Lo cual equivale a más de 190 mil pesos mexicanos.

(Con información de Excélsior)

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