Se recrudece crisis hídrica en Nuevo León

La crisis por la falta de agua en Nuevo León se recrudece aún más, pues la presa La Boca presenta su peor nivel de almacenamiento de la década al estar con 40% de su llenado, así lo confirman registros oficiales de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Además, vecinos que viven en las inmediaciones del embalse, ubicado en Santiago, afirman que no la habían visto “tan seca” desde hace 30 años.

Esta situación en el vaso, aseguran los residentes, provoca problemas de inseguridad como robos en fincas y accidentes de vehículos acuáticos, así como de salud, pues el aire levanta tolvaneras que saturan de polvo las viviendas.

De acuerdo con el Sistema Nacional de Información del Agua (Sinia), de la Conagua, que arroja datos de 2010 a la fecha, el embalse tenía ayer 15.6 millones de metros cúbicos (Mm³) de agua que es el 40% de un total de 39.4 Mm³que le caben.

Y, de hecho, en la década nunca había descendido de 50%; el segundo año más bajo fue en el 2012 cuando el 22 de diciembre estaba al 61% de su llenado.

Ricardo Dieck Pérez, integrante de la Asociación de Vecinos de la Presa La Boca, afirmó a El Horizonte que el nivel no había estado “tan raquítico” desde hace más de 30 años.

“A finales de los ochentas, cuando fue aquella sequía tan fuerte, la presa bajó mucho y desde entonces no la veíamos así; en el 2010 estuvo también muy baja, pero fue unos días, porque luego la rellenaron”, señaló.

Imágenes tomadas con un drone por El Horizonte en la zona donde están los restaurantes evidencian que entre el malecón y el agua hay por lo menos 150 metros de distancia.

Comerciantes que trabajan en las inmediaciones de la presa afirman que normalmente para estas fechas el líquido está cerca de la orilla, porque la ciudad viene de una época en la que llueve mucho como septiembre lo cual esta vez no ocurrió.

Dieck Pérez puntualizó que alrededor de la presa hay alrededor de unas 100 fincas. Además, indicó que cuando las orillas quedan desnudas, aumentan los robos pues es fácil que los ladrones entren incluso con vehículos a viviendas y negocios.

“Lo primero es la inseguridad, la presa es una barrera ecológica contra todo tipo de riesgo; ladrones y todo tipo de inseguridad, y esa es la que nos aqueja principalmente”, indicó.

De igual forma, dijo el vecino, desde hace meses, se han incrementado los accidentes de lanchas y motos acuáticas que topan con obstáculos que van quedando al descubierto.

“En cuanto a las embarcaciones, estas no pueden navegar por el bajo nivel, desde septiembre, desde agosto, veo tropelazos, transmisiones tronadas, motores hechos garras, flechas rotas, y no sabemos qué va a pasar el año que entra, porque ahorita el nivel sigue bajando”, recalcó.

La presa La Boca se le considera un vaso regulador para el abasto de la zona metropolitana pues ahí llega el agua del embalse Cerro Prieto, en Linares, que surte la ciudad.

No hay agua con qué rellenarla

Cuando la presa ha quedado con bajos niveles, precisamente para evitar esa problemática, los vecinos han acordado con Conagua y con Agua y Drenaje de Monterrey (AyD) que se trasvase líquido de la presa Cerro Prieto, pero en la actualidad esa posibilidad es imposible porque ese embalse está peor.

Dieck Pérez indicó que en el año 2010 ocurrió algo similar, pero que en pocos días rellenaron el vaso con agua de Cerro Prieto.

Según el monitoreo diario de presas de la Conagua, ayer esa presa ubicada en Linares acumulaba 32.6 Mm³ de 300 que le caben por lo que estaba al 11% de su llenado.

Ese nivel también es el más bajo de su historia.

“Muchos golpes en sus embarcaciones como: transmisiones rotas, motores quemados, son muchos problemas que causan esto”, señaló.

 AyD contempla recortes de agua

Debido al bajo almacenamiento de agua en las presas que surten del vital líquido a la zona metropolitana de Monterrey, las autoridades de Agua y Drenaje contemplan realizar recortes al servicio.

El 2 de noviembre El Horizonte documentó que Nuevo León enfrenta una “crisis hídrica muy importante” por lo que en enero comenzarán a aplicarse los primeros recortes de agua a la población, mismos que no se han visto desde la década de los 80, advirtió Agua y Drenaje de Monterrey (AyD).

De acuerdo con lo que comentó en ese entonces el director de la paraestatal, Juan Ignacio Barragán, el objetivo es reducir de 15.5 metros cúbicos por segundo a 13.5 m³/s el consumo de agua de la metrópoli, ante los inminentes “tandeos”.

No obstante, a esta situación la dirección de Agua y Drenaje se dio a la tarea de conectar 20 pozos de agua localizados en la Macroplaza, los cuales agregarán 700 litros por segundo (l/s) de agua a la red.

Y para ello se construye un túnel de 700 metros que cruza el lecho del río Santa Catarina a la altura de la calle Doctor Coss, y que irá hacia el poniente para conectarse con un acueducto que lleva al tanque de la colonia Altamira.

 Estado evalúa retomar plan Monterrey VI

Ante esta crisis hídrica por la que atraviesa el estado, el gobierno de Nuevo León revalúa el anteriormente desechado proyecto de Monterrey VI, que consiste en traer agua mediante un acueducto desde el río Pánuco.

El director de AyD, Juan Ignacio Barragán, puntualizó a El Horizonte que dicho análisis lo realiza junto con su equipo de trabajo y se estudia bajo un nuevo esquema financiero que no eleve costos, pero que aproveche la concesión de agua otorgada al estado en 2011 y que tiene vigencia por 30 años para extraer agua de la referida cuenca hídrica.

Monterrey VI es un proyecto que consiste en traer a Nuevo León hasta 473 millones de metros cúbicos (Mm3) de agua al año de la cuenca del río Pánuco, equivalente a 15 m3/s. Este volumen de líquido garantizaría, según estimaciones, un abasto de 50 años hasta para seis millones de personas. Actualmente, el consumo en la zona metropolitana de Monterrey es de 15.5 m/s.

Para realizar el trasvase es necesario construir un acueducto de 372 kilómetros de la presa Cerro Prieto al acueducto Tapaón, en San Luis Potosí, el cual conecta con el río Pánuco.

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