Abatidos: ¡Oposición, de rodilla ensangrentada!
Abatidos: ¡Oposición, de rodilla ensangrentada!
El asunto es muy simple, o son muy “mansos” con “e”, no les dieron lo que esperaban, pero no creo que la oposición, incluidos Aristegui, Brozo, Germán, Lily y tantos, no supieran cómo es y procesa la política el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien ha demostrado en 20 años y seguro muchos más que es un hombre transparente.
Y como tal, nunca ha mentido sobre lo que quería para su concepción de República. Ojo, de la misma manera que en 90 años los que ahora están enojados se despacharon con la misma cuchara del poder federal.
Por lo mismo, es que no tienen candidato presidencial y los que aparecen son realmente difíciles de salvar, no por la falta de capacidad, que no dudo que al menos dos la tengan, como es el caso de Beatriz o de De la Madrid, pero ciertamente no hay otra manera de explicar por qué siguen aterrorizados, como si AMLO trajera una sierra eléctrica en la mano.
Y ustedes se preguntarán, por qué es que la oposición sigue atónita y “hamsteriana”. Como ahora que se dicen nuevamente “violados” en el Senado cuando, insisto, o son muy lerdos y no “maquivelan nada”, o de plano sólo salen a “lagrimear” lo que cualquiera de la carrera de Ciencias Políticas les pudo dar como recomendación.
¡Revienten! En todas las opciones absurdas posibles. Pero no, que, por otra parte, ciertamente la verborrea de Ricardo Monreal tiene una virtud, tampoco le ha quitado una sola coma y sigue de rodilla ensangrentada frente a su Dios, al sol de hoy, al de la mayoría de los mexicanos.
En el aguantar, incluso se parece, pero no es igual lo que dice Marcelo Ebrard. “Nada más es de leer lo que dice y lo que pintan en las paredes. Si es Claudia para qué hacemos encuesta, ¿no?”. Y el presidente dice: quiero que sea encuesta.
“Dije desde diciembre, no sé si se acuerden, le dije a Morena en una carta, yo no pienso que debamos llegar los funcionarios, las funcionarias y funcionarios o quienes estamos en el servicio público en nuestros cargos en la encuesta”.
Y la líder, Claudia Sheinbaum, ni se mortifica ni se acongoja, les revira a todos con una sonrisa. “Hay que tener paciencia, corazón caliente, cabeza fría, hay que esperar a la encuesta y lo que establece el partido (…) no hay que tener ansias, hay que esperar los tiempos”.
El tema se aprieta, para los que están a la zaga, pero que consideren salirse de Morena, de la Cuarta Transformación, ni de chiste lo contemplan, porque saben que la apuesta por la oposición sigue desarticulada y no se trata de que lleguen y todo el mundo les ponga una alfombra roja.
Así que a comer tamales de chipilín… Y apostar por seguir siendo líder del Senado por seis años más, jefe de la CDMX, porque jura se la deben, pero en el caso de Marcelo, tomar “alka” como secretario, pero ahora de Gobernación… Al tiempo…