Opinión

Infonavit: elefante blanco

Sección Editorial

  • Por: Adalberto Madero
  • 03 Enero 2023, 20:00

En mayo del año pasado, el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) estableció un programa para beneficiar a sus derechohabientes cuyos créditos sean anteriores al 2016, consiste en cambiar su deuda en Veces Salario Mínimo (VSM) a pesos; al ser Nuevo León la cuarta entidad con más afiliados supone un impacto positivo para la gente, sin embargo, la forma cómo se está llevando a cabo indica que no surtirá los efectos deseados, veámoslo a continuación.En el 2022 convergieron varios factores que explican la implementación de esta propuesta de conversión de deuda, entre otros: la inflación más alta de los últimos 21 años, la perspectiva de incremento salarial, así como la convicción del asegurado de que su crédito será impagable. Por consiguiente, el instituto ofreció la posibilidad de cambiar la deuda a pesos, cuyos beneficios son:1. Las mensualidades quedan congeladas.2. Se establece una tasa de interés fija del 1% al 10.45%.3. Disminución en el pago de la mensualidad.4. El pago de aportación patronal se va directamente a la amortización del crédito.A pesar que Nuevo León tiene 487,043 derechohabientes, el Infonavit solamente cuenta con tres oficinas, además, la difusión de este programa carece de una campaña publicitaria acorde a los beneficios sociales que representa para miles de familias que hoy viven angustiadas por disponer de poco tiempo para renegociar favorablemente la deuda de su casa. Como paliativo para “facilitar” su registro y cambio de modalidad, se ofrece la alternativa electrónica como si su sitio de Internet fuera ágil y amigable, todo lo contrario, la gente se pasa horas queriendo acceder al programa y la mayoría no puede concluir el trámite porque falla el sistema. Además, buena parte de los derechohabientes no están familiarizados con el manejo de la computadora o no disponen de equipo para subir la información solicitada.Los políticos como viven en una burbuja –rodeados de privilegios, comodidades y fantasías– creen que todas la personas tienen acceso a Internet y que para el 10 de enero habrán podido registrarse para modificar su crédito. ¡Están equivocados! La gente desatiende su trabajo y el hogar para acudir a las oficinas del Infonavit, en donde es mal asesorada y la hacen dar vueltas, por un trámite que en teoría debe ser rápido y eficiente.Hay que decirlo con todas sus letras: este programa le puede cambiar la vida a miles de familias, quienes podrán tener la certeza de cubrir en un tiempo determinado la deuda de su casa, pero al contar con una implementación deficiente está ocasionando más problemas que soluciones. Se debe resolver de una manera responsable y acorde a las condiciones sociales de la gente por lo que es necesario ampliar la fecha del registro.Un gobierno humanista hubiera hecho equipo con el Instituto para difundir y facilitar el acceso de estos beneficios a la clase trabajadora, pero como este gobierno está bajo el signo del Instagram su prioridad es generar historias vacías para aparentar que está trabajando.En conclusión, se requiere de un gobierno local que se coordine con la federación para atender el patrimonio de lo más importante: la gente.

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