Opinión

La claridad salva relaciones

Sección Editorial

  • Por: Susana Lopez
  • 29 Agosto 2023, 20:10

Sí, la comunicación es importante, pero… ¿por qué?

Para comenzar, te cuento cinco puntos esenciales del poder de la comunicación.

Primero, fortalece el respeto entre las personas, contribuye a una relación honesta, ayuda a prevenir malentendidos, nutre la confianza y permite la ayuda adecuada, siempre y cuando lo sepamos pedir.

Si todo parece que suma y contribuye a una relación sana, ¿por qué batallamos entonces tanto para comunicarnos? 
Las razones son muchas, aquí algunas de ellas: No sabemos lo que necesitamos, no conectamos con lo que sentimos, tenemos un sistema de creencias que nos alejan de comunicar directa y abiertamente.

Creencias que se escuchan como: “No tengo por qué decirlo, tu deberías de saberlo, si tengo que pedírtelo ya no lo quiero, si le pido algo voy a sonar súper egoísta, etc…”

La realidad, es que la comunicación con claridad, salva las relaciones. Déjame aclararte algo: Es tu responsabilidad comunicar y dejar en claro que sí, que no. Las personas además, no leen la mente ni saben qué quieres, cuándo lo quieres y cómo lo quieres. La diferencia es que tú SÍ.

Claro, puede parecer difícil al comienzo, pero todo es cuestión de práctica, práctica y más práctica. Algo esencial para saber y poder comunicarnos asertivamente tiene que ver con primero podernos comunicar a nosotros mismos ciertos pensamientos y emociones propias.

A mayor desconexión de la persona, más difícil será que su comunicación sea clara y directa. Entre mayor conexión entre los pensamientos, necesidades y emociones de una persona - en principio - más probabilidades tiene de ser asertivo. Pero, ¿qué es la asertividad?

“La habilidad de hablar e interactuar de una manera que se considere y respete los derechos y opiniones de otros, al mismo tiempo que se aboga por los límites, derechos, necesidades propias”. según Pipas & Jaradat.

Te comparto algunas pautas para trabajar en tu asertividad: Conecta con tus necesidades, conoce tus límites, permítete sentir e identifica qué es eso que sientes. Ser asertivo implica comenzar, sostener o concluir una conversación, rechazar peticiones, pedir favores así como reconocer lo positivo y lo negativo.

En vez de decir: “¡Te pasas, eres un desconsiderado malagradecido. Siempre arruinas todo!”. Es muy diferente a expresarte:

 “Cuando tú llegas tarde para cenar y no me avisas, yo siento que no valoras mi esfuerzo por preparar la cena. Me duele y me molesta. Por favor, a la próxima avisa con tiempo o yo comenzaré a cenar.”

¿Notaste la diferencia? Eso es asertivo, poder expresar claramente sin llegar a ofender al otro. Si no sabes cómo comenzar, recuerda que #noesdelocos pedir ayuda para conectar contigo primero.

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