Anoche soñé que la entrevistábamos Marián y yo, en su casa pegada al teatrito Arlequín, también de su propiedad en la colonia Cuauhtémoc. La conocí a través de una de sus bisnietas, y una vez la llevé a la ANDA, ahí cerca. A algunos de los vecinos de esta colonia los conocí: Juan Rulfo, Juan José Arreola, Gabriel Vargas (creador de la familia Burrón) y su esposa Lupita Appendini (quien solía acudir a nuestras tertulias semanales en el restaurante del hotel María Cristina), Jesús Martínez “Palillo” y su hija Ana Martin, Luis Guillermo Piazza, Pita Amor...
Tomado de acortar.link/y5aUpW: “Nadia Haro Oliva (1916-2014), registrada al nacer como Albertina Charlotte Boudesoque Noblecourt, fue una actriz francesa de cine, teatro y televisión afincada en México. Pertenece a las actrices de la llamada Época de Oro del cine mexicano.
En su juventud fue modelo de una casa de modas en París, por lo que posteriormente se convirtió en modista. Cuando tenía 18 años conoció a quien sería su esposo, el coronel mexicano Antonio Haro Oliva, quien se encontraba como agregado militar en dicha ciudad. Destacó como atleta y esgrimista, participando en los Juegos Olímpicos de Berlín 1936. La labor como militar de Antonio los obligó a dejar París y volver a México, en donde se casaron. Nadia continuó como esgrimista; sin embargo, después de los Juegos Olímpicos de Londres 1948, por insistencia y recomendación de un amigo cercano de la pareja, se inició en la actuación.
Víctor Moya, un amigo de la pareja que tenía una compañía escénica, invitó a Nadia a formar parte de su compañía. De esta manera, tomó el nombre y el apellido de su marido como "nombre artístico", lo cual se estilaba en esos años, y debutó como actriz en la obra Los de abajo, en 1950, y en La hora soñada, de Anna Bonacci, en 1952 (esta obra, verdadero ‘caballito de batalla’ de Nadia, que duró décadas presentándose, la vi con mis papás en el teatro Arlequín hacia 1963; me impresionó ella por la característica altanería de quien se sabe o se cree bella). En 1956, participó en la película Donde el círculo termina, compartiendo créditos con Sara Montiel, Raúl Ramírez, Antonio Raxel, y Jorge Martínez de Hoyos. En 1958, protagonizó junto a Carlos Riquelme la película Misterios de la magia negra, compartiendo créditos con Aldo Monti, Carlos Ancira, Angelines Fernández, entre otros.
En 1959, participó en la película Yo pecador, junto a Pedro Armendáriz, Anita Blanch, Elizabeth Dupeyrón, Sara García, Miguel Arenas, José Mojica, Enrique Rambal, Libertad Lamarque y Manola Saavedra, entre otros.
A principios de la década de los 60, participó en la película Amor en la sombra (1960) protagonizada por Libertad Lamarque y Enrique Rambal. En 1962, el productor Luis Buñuel la llamó para incorporarse al elenco de la película El ángel exterminador protagonizada por Silvia Pinal, Enrique Rambal, y con las actuaciones estelares de Jacqueline Andere, Claudio Brook, Ofelia Guilmáiny Tito Junco, entre otros.
Regresó al cine con una participación estelar en la película del productor René Cardona Jr. en 1967 titulada El día de la boda, protagonizada por Enrique Rambal, Lucy Gallardo, Elsa Aguirre, Irma Lozano, entre otros. En 1969, René Cardona Jr. le dio la oportunidad de participar en la película El matrimonio es como el demonio junto a Elsa Aguirre, Mauricio Garcés, Evangelina Elizondoy Isela Vega, entre otros.
En la década de los 70, 80, se limitó a participar en telenovelas, en las que solía interpretar a mujeres fuertes o bien a villanas, como en las telenovelas Gabriel y Gabriela de Patricia Lozano y Teresa de Lucy Orozco; en ambas interpretó a madres manipuladoras e inescrupulosas. En 1990, Carla Estrada la invitó a la telenovela Amor de nadie, donde Nadia interpretó a una francesa. En 2004, debido a un accidente al caerse de las escaleras de su casa, su salud se vio muy deteriorada y eso la obligó a dejar los escenarios.
En 2009, vendió el Teatro Arlequín al productor Antonio Calvo. A sus casi 96 años de edad, la actriz murió en su casa”.
