En efecto, entre el festival P’al Norte, rifa de autos y demás artículos electrónicos para los agremiados magisteriales de la sección 50 y 21 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), así como las posadas de alumnos y maestros en sus respectivas escuelas y delegaciones sindicales; además de la inesperada Junta de Consejo Técnico dirigida a directivos, se apersonan las vacaciones decembrinas a partir del viernes 19, después de clases.
El magisterio nuevoleonés regresa el 7 de enero del 2026 y, ¿a qué no saben a qué? Adivinaron: a junta de Consejo Técnico Escolar; ¡Jesucristo Resucitado! Amén. Ahora, la docencia espera que, llegando de vacaciones, al partir la rosca de Reyes, no haya un curso extra superrápido de inteligencia artificial, como el del mes pasado. Los niños y jóvenes se reincorporan el jueves 8 de enero a sus actividades normales. ¿En jueves? ¡Sí! “pos” al cabo qué; saco incapacidad jueves 8 y viernes 9 y acudo a trabajar hasta el lunes 12.
Los estudiantes de educación básica gozarán merecidamente del período vacacional de invierno con júbilo y esperanza. ¿Esperanza? ¡Sí, señor! Ellos, sorpresivamente, le hicieron su respectiva carta a Santa Claus, “suplicándole” lo que jamás me hubiera imaginado. Para efecto de construir esta narrativa, nos apoyamos en esas cartas a Santa para sellar y corroborar que los problemas sociales y políticos, tanto locales como internacionales, invaden significativamente su homeostasis, en la que debieran, por su edad, estar a diario. ¡Tienen temores y/o traumas de adultos siendo unos niños!
Al leer sus esperanzas, sueños y aspiraciones para el año 2026, inmediatamente te das cuenta de sus anhelos: escuelas espaciosas para jugar y, sobre todo, que estén siempre limpias; que en sus aulas o salones de clases haya internet seguro y de fácil acceso; que les permitan llevar sus celulares y/o tablets para hacer trabajos e investigaciones; que los transporten gratuitamente al plantel educativo, así como lo hacen las escuelas de Estados Unidos; que la salida sea a las 3:00 pm con la debida proporción de alimentos balanceados; que las calles estén pavimentadas y libres de baches y de fugas de agua. ¿Qué? Sí, sí, sí; que no haya tiradero de agua por tuberías rotas o mal arregladas; QUE CESE LA VIOLENCIA Y LAS MATAZONES que se dan a diario; que cuiden a las personas que van a tomar el camión urbano o el metro; que protejan a los perritos callejeros llevándolos a lugares seguros y limpios; que castiguen a los malhechores y a los vendedores de drogas en las escuelas; que Santa les traiga ropa, tenis y útiles escolares suficientes para estudiar y hacer sus tareas, y QUE LLENE SU HOGAR DE AMOR Y PAZ.
¡Ah! Se me pasaba, que “mami” no sea tan enojona y que siempre tenga trabajo.
Al leer cada cartita llena de ternura, fe e inquietud por vivir en un lugar tan complicado como Monterrey y sus alrededores, se me humedecieron los ojos dadas sus angustias, pues ¿qué más podía esperar? Lo que me sorprendió sobremanera, fue la edad tan corta de estos niños y sus sentimientos tan encontrados y enojados con la rotura del tejido social en la que están atrapados por este sistema socioeconómico. Su ira oculta se puede observar en su mirada triste e inocente; en ella podemos percatarnos de lo distópico que es su manera de vivir.
¿Saben ustedes de qué grado de estudios estamos hablando? ¿de tercero de secundaria? ¿alumnos de preparatoria? ¡No! De niños de primer grado de secundaria. Con tan solo 12 años de haber nacido, ya tienen serias preocupaciones en su haber. Asimismo, imagino cómo las redes sociales y los distintos medios de comunicación han estigmatizado el proceso diario de su existencia. Es insoslayable el programa de “la mañanera”, las discrepancias por el presupuesto estatal, los grandes desaciertos en la obra pública de los alcaldes del área regiomontana, sin dejar de pasar por alto “el hambre educativa que piden a gritos”. En conjunto, están dejando huellas negativas en su genética.
Hay mucho quehacer en todos los sectores el servicio público en general, pero el educativo es el que está olvidado y menospreciado. A los políticos y a sus partidos que los postulan, tratar de elevar la calidad de la educación NO ES SU PRIORIDAD. En fin, en sus pecados llevarán sus penitencias. La verdad, como es. Se tenía que decir, y se dijo. Hasta la próxima.