GM mantiene operaciones estables en Coahuila pese a incertidumbre

La armadora General Motors mantiene sin cambios su ritmo de producción en Coahuila, sin aplicar paros técnicos ni ajustes en sus turnos de trabajo, pese al clima de incertidumbre generado por el debate sobre aranceles y las declaraciones del expresidente estadounidense Donald Trump, durante todo el primer semestre del año. 

De acuerdo con autoridades estatales y representantes del sector industrial, la planta ubicada en Ramos Arizpe, continúa operando con normalidad, lo que brinda estabilidad tanto a los trabajadores como a las empresas proveedoras que forman parte de la cadena automotriz en el estado.

El gobernador Manolo Jiménez Salinas informó que ha sostenido comunicación directa con los directivos de la compañía, quienes confirmaron que no existen modificaciones en la programación operativa ni señales de recorte en la producción, por lo que agregó que esta situación representa un mensaje de certidumbre para el entorno económico regional. 

Uno de los factores que ha fortalecido esta continuidad es la fuerte demanda de los modelos actuales de la marca, así como la acelerada producción de vehículos eléctricos, como la Blazer EV y la Equinox EV, que se ensamblan en la planta de Ramos Arizpe. 

Esta línea de producción forma parte clave de la estrategia global de electrificación de GM, lo que garantiza empleo sostenido y mayor dinamismo económico en un periodo que tradicionalmente era considerado de baja actividad para el sector.

Desde el ámbito empresarial, Arturo Reveles director de CANACINTRA región sureste, se destacó que la programación de vehículos responde a estudios de mercado rigurosos y que cualquier ajuste obedece a criterios técnicos previamente definidos. 

La continuidad en la producción también se vincula con el aprovechamiento de los calendarios de modelo fiscal y la entrada de nuevas unidades, lo que permite mantener la planta activa sin interrupciones.

Para Canacintra Coahuila Sureste, el hecho de que la armadora mantenga su operación sin pausas evita impactos negativos en el empleo y contribuye a preservar la confianza en uno de los sectores clave para la economía estatal.

La industria automotriz representa uno de los principales motores de inversión y generación de empleo en Coahuila, por lo que la estabilidad de empresas como GM es vista como un termómetro de la solidez industrial en la región.