Busca SAT fiscalizar a empresas digitales

El Servicio de Administración Tributaria (SAT) quiere fiscalizar a las empresas digitales como Uber, DiDi, Cabify, Airbnb, Netflix, Spotify, Cornershop y Amazon.

Esto a pesar de que existe una polémica global entre expertos en temas de impuestos, al cuestionarles por ejemplo si una persona paga por descargar una canción en México de una plataforma de Estados Unidos, ¿en qué país debe de tributar?

Por lo pronto, el gobierno mexicano ya dio el primer paso para lograr su cometido.

Ya que el SAT acordó con las plataformas Uber, Cabify, Bolt, Beat, Cornershop, Rappi, Sin delantal y Uber Eats, que desde el 1 de junio de 2019 estas empresas retendrán de sus conductores y repartidores entre 3% y 9% de ISR y 8% de IVA.

Las corporaciones aseguraron que esto no incrementará sus tarifas, ya que en teoría sus asociados han liquidado los impuestos correspondientes a los pagos que reciben por su trabajo en estas apps; de hecho, una de las obligaciones para que puedan acceder a las mismas es estar dado de alta en Hacienda.

Actualmente, este esquema es voluntario, inclusive la china DiDi decidió no adherirse.

Pero el SAT aún tiene un largo camino por recorrer si es que quiere que además de sus conductores las empresas digitales tributen en México por sus ingresos, debido a que la tecnología ha avanzado más rápido que su regulación a nivel mundial.

Uno de los países más avanzados en esta materia es Francia, en donde el Senado debate una propuesta que, de ser aprobada, gravaría con al menos 3% las ventas de las corporaciones digitales que generen al menos €750 millones de euros anuales a nivel global y €25 millones de euros a nivel nacional.

Cabe mencionar que Reino Unido, Italia y España están tratando de replicar lo que está ejecutando Francia, aunque van más rezagados.

A pesar de que no existe un cálculo exacto de lo que el Servicio de Administración Tributaria podría recaudar, el organismo estimó que sería de alrededor de los $2,200 millones de pesos mensuales.

Una cifra nada despreciable si se consideran todos los programas sociales que el actual gobierno federal comprometió, la abultada deuda de Pemex, que es la petrolera con más pasivos a nivel global, y que México es el último país en recaudación de impuestos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).