China acusa a persona de recopilar información para Gran Bretaña

China informó que detuvo a un individuo acusado de recopilar secretos de Estado en nombre de la agencia de inteligencia exterior de Gran Bretaña, MI6.

El Ministerio de Seguridad del Estado publicó en las redes sociales el lunes que Gran Bretaña había estado cooperando desde 2015 con la persona, que dijo que era un ciudadano de una tercera nación y tenía el apellido Huang.

El Ministerio señaló que Huang había recibido formación en recopilación de inteligencia, se le proporcionó equipo y había recogido numerosos secretos de Estado en repetidas visitas a China. No se facilitó más información sobre la inteligencia recopilada, y el Ministerio tampoco dijo cuándo había sido detenido o dónde se encontraba recluido.

La definición de secreto de Estado no está claramente definida en el opaco sistema político y jurídico chino, y muchas empresas de consultoría y asesoría han sido investigadas por obtener datos que normalmente son de dominio público, sobre todo si se comparten con entidades extranjeras.

El gobierno británico declinó hacer comentarios, de acuerdo con su política habitual en materia de inteligencia.

Las acusaciones de China se producen tras el deterioro de las relaciones entre ambas partes, provocado en parte por la oposición británica a las inversiones chinas en el país, especialmente en los sectores de la energía y las comunicaciones, en los que el gobernante Partido Comunista ejerce una fuerte influencia.

En septiembre, la policía británica informó sobre la detención de dos hombres a principios del año pasado, sospechosos de espiar para Beijing.

La policía no reveló el nombre de los hombres, pero medios de comunicación británicos publicaron que el más joven era un investigador parlamentario que trabajaba con legisladores de alto rango del Partido Conservador centrado en China. Gran Bretaña condenó la injerencia en la democracia parlamentaria británica, pero China negó las acusaciones de espionaje.

Londres también se ha mostrado muy crítico con el recorte de los derechos políticos por parte de China en Hong Kong, antigua colonia británica donde las violentas protestas antigubernamentales de 2019 se saldaron con la imposición por parte de Beijing de una arrolladora ley de seguridad nacional y cambios electorales.

Estos han eliminado en gran medida cualquier oposición política a los decretos de Beijing y han silenciado la libertad de expresión en la que había sido una de las sociedades más dinámicas de Asia y un importante centro financiero.

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