Capitalinos intentan volver a la normalidad

Los habitantes de la Ciudad de México intentan volver a la normalidad y por ello por medio de cartelones se dan ánimos como el que decía ‘‘A darle carnal”.

Varios planteles educativos de la ciudad entre los que se encuentran de educación básica y superior regresarán hoy a su actividad cotidiana, luego de seis días de inactividad por el sismo registrado de 7.1 grados que sacudió el centro del país el pasado 19 de septiembre.

Aunque ya la ciudad había reanudado muchas de sus actividades, aproximadamente 3,000 edificios permanecían cerrados, y en espera de que fueran revisados por las autoridades capitalinas.

Aunque cerca de 300 deberán o ya comenzaron a ser demolidos, el Gobierno de la Ciudad de México comenzó a colocar avisos en los mismos, para indicar cuáles edificios ya pueden volver a la actividad y cuáles no.

Sin embargo, la preocupación de los ciudadanos ahora es, que ocurrirá con las personas que han quedado sin vivienda, sin esposo o hijos, o sin su fuente de ingresos para vivir diariamente.

La señora Vero, dentista de profesión, recuerda que lo más difícil del terremoto de 1985, vino después de que acabaron las labores de rescate, miles quedaron sin vivienda y sustento.

Ella pertenecía al Club de Leones, ahora Rotarios, así que junto a su esposo se organizaban para llevar alimento diariamente a las personas afectadas.

“Yo espero que ahora no vuelva a ser igual, ojalá que el gobierno ahora si organice y vea todas esas necesidades, porque no queremos repetir esa historia, ojalá que la gente tampoco deje de apoyar”, dijo mientras espera noticias de su sobrina, quien quedó atrapada entre los escombros del edificio 286 de la avenida Álvaro Obregón, en la colonia Roma.

Buscan a más personas

Las siguientes horas en Álvaro Obregón 286 serán cruciales en el rescate de las 44 víctimas que, se estima, continúan atrapadas en los escombros.

De acuerdo con la información que le fue entregada a familiares, ya se llegó al último piso del 286. Ya metieron a los perros y ya se habla de un aproximado de que en las siguientes pocas horas se podrá llegar al sitio donde se detectaron señales de vida.

Se cree que pronto se llegará a una de las cápsulas donde hay vida. Después de una suspensión temporal en las tareas de rescate, se volvió a trabajar, pero ahora fueron elementos de la Marina. Hay 44 familias esperando. Hay 44 hijos, padres y hermanos bajo los escombros.