Este fin de semana, el Partido Acción Nacional (PAN) anunció el relanzamiento del partido, marcando un punto de inflexión hacia un nuevo comienzo rumbo a 2027. Al menos, esa fue la promesa de Jorge Romero, su presidente nacional.
Más allá de cualquier simpatía u objeción hacia el partido, es notable el ejercicio de introspección que realiza su Comité Ejecutivo Nacional, reconociendo la necesidad de un golpe de timón para enfrentar las condiciones electorales actuales. Estos los colocan como la segunda fuerza a nivel nacional, pero muy distantes del partido dominante, Morena. El PAN afirma haber emprendido este proceso de reflexión basado en la reciente decadencia electoral de su marca.
El evento de relanzamiento también abordó el crucial tema de las alianzas. Muchos anticipaban el anuncio público del rompimiento con el PRI, mientras otros esperaban la confirmación de una alianza nacional con Movimiento Ciudadano (MC). Ninguno de los dos escenarios se concretó. El líder del PAN optó por tomar distancia del PRI, pero sin llegar a "satanizarlo". Respecto a Movimiento Ciudadano, reconoció un acercamiento, aunque sin comprometerse en matrimonio político. Las palabras textuales de Romero fueron: "No dependeremos de las alianzas para ganar."
Esta declaración tiene una relevancia especial para el panorama político de Nuevo León, donde la elección de 2027 será crucial y la alianza del PAN (ya sea con el PRI o con MC) podría cambiar drásticamente el tablero electoral, particularmente en la contienda por la gubernatura.
La irrupción de "Regio Poder" en el escenario local
Por otra parte, esta semana se dio a conocer el registro de "Regio Poder", una agrupación política promovida por empresarios encabezados por Carlos Salazar Lomelí, ante el Instituto Estatal Electoral. Aunque se registró como una Agrupación Política y no como un partido, su objetivo de competir e influir en 2027 es claro.
Este grupo llega al panorama local como una alternativa para aquellos electores que ya no se identifican con las marcas tradicionales (PAN, PRI) ni con los partidos más recientes (Morena y Movimiento Ciudadano). "Regio Poder" tiene un perfil marcadamente corporativo, con la intención de reclutar líderes sociales para que encabecen un proyecto político con gran arraigo, visión y perspectiva ciudadana.
Mientras este nuevo actor emerge, el Congreso de Nuevo León atraviesa una de sus peores legislaturas: estancado, con bancadas débiles y sin liderazgos visibles, con contadas y honrosas excepciones, especialmente de mujeres.
Con este panorama, podemos anticipar que las próximas elecciones en Nuevo León en 2027 serán mucho más interesantes de lo que parecían. El pronóstico es reservado, con tres fuerzas políticas que mantienen porcentajes de votación similares, y con nuevas opciones locales que, a primera vista, lucen mucho más organizadas y serias de lo que se había visto antes. El desarrollo de los hechos está por verse.