Los partidos políticos nuevoleoneses opositores al equipo naranja del “gober” Samuel García están dando mucho qué desear en lo que se refiere a las candidaturas para alcaldes, diputaciones federales y locales. Se escucha mucha actividad en los pasillos naranjas cuya efervescencia empieza a hacer sus efectos; hay muchos encuerdados en este tema. Al primer jefe estatal le interesa mucho tener el control en el Congreso; es más, es su prioridad, dado que con él está justo en estos momentos son puros corajes los que hace porque “no lo dejan hacer a su libre proceder.
Sin embargo, la oposición está adormilada (o de plano “la caballada está muy flaca”), no se le ven indicios de dar duro la pelea. Con la inscripción de la esposa del gobernador para la alcaldía de Monterrey, Mariana Rodríguez, se pensaba que los del PRIAN y los de Morena (y demás partidos políticos locales) sacarían ipso facto sus mejores “gallos y gallinas” para enfrentar al partido oficial estatal, Movimiento Ciudadano.
Varios alcaldes ya están en el camino de la reelección con algunas o muchas posibilidades, según sea, de lograrlo; entre los que sobresalen en esta intentona es Andrés Mijes Llovera, primer jefe municipal de General Escobedo. Luego le sigue el primer edil de Santa Catarina, Jesús Nava. ¿Lograrán su objetivo? Los votantes tienen la última palabra. Bueno, y los del PRIAN ¿hasta cuándo darán color?
En Apodaca y Guadalupe las cosas no parecen muy bien que digamos, con eso de que los alcaldes respectivos andan tercos en la intención “de heredar el puesto a sus hijos” como que están cayendo en las viejas prácticas que la ciudadanía ha reprobado en las últimas décadas.
Ahora bien, los de Morena: ¿dónde están? Aquí las cosas están más en suspenso que las películas de Boris Karlof, Cristopher Lee, Agatha Christie o las de El Santo y Blue Demon. Simple y sencillamente están esperando la bendición de Claudia Sheinbaum y/o AMLO. Al menos ya está definida la dupla que jugará para senadores: Judith Díaz y Waldo Fernández.
Es claro que hay muchos juicios promovidos por la oposición estatal y por el equipo naranja. Muchos de ellos se resolverán por la Suprema Corte de Justicia de la Nación; las resoluciones traerán en cascada definiciones para nombrar las candidaturas para entrar de lleno al entramado electoral para vivir del erario gubernamental según sea el nivel.
Los votantes nuevoleoneses afirman categóricamente que “es tan malo el pinto como el colorado”; no hayan para dónde dirigir las luces eleccionarias: comentan que están hartos de corrupción, nepotismo, de “siempre los mismos”; así como también de los baches y la mediocridad con la que tratan a las calles y avenidas afectadas, de la contaminación, del tráfico enfermizo, obvio de la inseguridad, del abuso de los agentes de tránsito en Monterrey, del “tortuguismo en la impartición de justicia así como del Poder Judicial en general; y para rematar de las improvisaciones en el sector educativo y, al mismo tiempo, la poca o nula actuación sindical a favor de los docentes y del personal de apoyo debido a que la autoridad tiene el control total.
A propósito, ¿HASTA CUÁNDO MEJORARÁ EL PÉSIMO SERVICIO DE SALUD QUE OFRECE TANTO EL ISSSTE COMO LA SECCIÓN 50 DEL SNTE? Ambas instituciones están rebasadas en su operación y falta de recursos para atender a una población en constante aumento y necesidad. La mejoría debe ser URGENTE dadas las condiciones ambientales de nuestra región. Basta de simulaciones, corrupción y actos que denigran la buena voluntad del personal de estos nosocomios. Es imperante cuidar la salud del magisterio y de sus familias.
Estas son las razones por la que afirmamos que en Nuevo León actualmente en política “HAY CALMA CHICHA”. Entiéndase ésta como una calma que desespera. ¿Usted qué opina?