Hace unos días me preguntaron en Azteca Noreste qué esperaba de este tercer debate presidencial. Respondí a la manera de Carlos Monsiváis: “lo mismo que espero de las campañas electorales: que se acabe”.
Sin embargo, frente a los otros dos debates presidenciales, este tercero y último sobresalió para bien. Las candidatas y el candidato fueron más concretos. También fueron persistentes en sus errores dialécticos. Si se privilegian los ataques a las propuestas, el debate se convierte en ministerio público. ¿Es lo que queremos? Los nuevoleoneses no.
Ahora bien, dado que tú y yo somos de Nuevo León, nos interesa especialmente los aspectos del tercer debate que tuvieron que ver con nuestro estado.
Soltaré algunas opiniones al aire. Para empezar el tema de la vivienda. Me pareció bien lo que dijo Jorge Álvarez Máynez, antes de prometer cuántas más casas construir, hay que resolver qué hacer con las casas abandonadas. Hay miles de casas abandonadas en Nuevo León por culpa del Infonavit. En otro artículo analizaré este grave fenómeno.
Por otro lado, tener una casa no es lo mismo que gozar de una vivienda. Esto último implica un ecosistema amigable. No lo tenemos aún.
Y hablando de reformas, a los nuevoleoneses nos interesa mucho una verdadera reforma fiscal y una reforma del Pacto Fiscal.
Tenemos que reformar el Poder Judicial, a nivel federal y a nivel local. Más allá de propuestas campañeras y preferencias partidistas, es inconcebible que la Ministra Presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), esté negociando en cenas secretas con el dirigente del PRI, Alejandro Moreno, alias Alito junto con magistrados electorales. Esa cena fue todo menos casual.
No fue una reunión de cuates. ¿O sí?
Más inconcebible aún es que se esté espiando en los WhatsApp los mensajes de la Ministra Presidenta. ¿En manos de qué corporativos están nuestras vidas? ¿Tan inocente y al mismo tiempo tan inescrupulosa la Ministra Norma Piña? En este caso hay gato encerrado. Y riesgos de ingobernabilidad por varios frentes.
En el caso de migración, el noreste de México se está convirtiendo en destino y no en tránsito de migrantes. Claudia Sheinbaum debe ser más contundente en el tema. ¿Qué hacer con estos migrantes, sobre todo ahora que gane Donald Trump la presidencia en Estados Unidos el próximo noviembre? Retornarlos a sus países de origen, dijo Claudia Sheinbaum. Falta saber cómo.
Nos urge una nueva política exterior enfocada en el rubro comercial. Sólo el candidato de MC habló del nearshoring como la oportunidad de oro para detonar a Nuevo León como potencia regional. Xóchitl lo hizo superficialmente. Claudia habló de inversión extranjera directa, pero no habría por qué distinguir entre la IEP de CDMX y la que se ha instalado en Nuevo León.
¿Conclusión? Depende a quién le vas de los tres candidatos presidenciales. Ganó el debate según el cristal con que lo viste. Una propuesta mía: ya basta de cartelitos ridículos para compensar la falta de argumentos. El meme no es debate.