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Salud

Disfruta el verano sin sufrir un golpe de calor

Ante las altas temperaturas registradas en el país, es crucial tomar medidas preventivas y reconocer los síntomas de insolación.


  • 03
  • Julio
    2023

El golpe de calor es la forma más grave de lesión por calor y puede ocurrir si la temperatura del cuerpo alcanza los 40 °C o más. Esta afección es más frecuente en los meses de verano.

Según información de La Clínica Mayo: “El golpe de calor requiere tratamiento de urgencia. El golpe de calor sin tratar puede dañar rápidamente el cerebro, el corazón, los riñones y los músculos.

“El daño empeora cuanto más se retrasa el tratamiento, lo que aumenta el riesgo de sufrir complicaciones graves o la muerte”, detallan los especialistas.

Los signos y síntomas del golpe de calor incluyen:

  • Temperatura corporal alta: Una temperatura corporal de 40 °C o más, es el principal signo de insolación
  • Estado mental o comportamiento alterado: La confusión, la agitación, la dificultad para hablar, la irritabilidad, el delirio, las convulsiones y el coma, pueden ser el resultado de un golpe de calor
  • Alteración de la sudoración: En el golpe de calor provocado por el calor, la piel se sentirá caliente y seca al tacto 
  • Náuseas y vómitos: Puede sentirte mal del estómago e incluso vomitar 
  • Piel enrojecida: La piel puede enrojecerse a medida que aumenta la temperatura del cuerpo
  • Respiración rápida: La respiración puede volverse agitada
  • Ritmo cardíaco acelerado: El pulso puede aumentar significativamente debido a que el estrés por calor impone una tremenda carga al corazón para ayudar a enfriar el cuerpo
  • Dolor de cabeza: Puedes experimentar palpitaciones a la altura de la sien

Tratamiento

La piedra angular para enfrentar el golpe de calor es la reducción rápida de la temperatura dentro de la primera hora de los síntomas, es una de las medidas más efectivas para evitar complicaciones de salud.

  • Aléjate de la luz solar directa
  • Retira la ropa constrictiva o sofocante
  • Prueba con inmersión en agua templada o fría, o bien colocar compresas frías en zonas de flexión, frente y/o cuello
  • Acude a consulta con un especialista

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