Salud

Las ciudades y las epidemias

Desde hace un mes, uno de los temas más fuertes que oímos en las noticias, en las mesas de reuniones y con familiares es el tema del COVID-19, llamado genéricamente como coronavirus


  • 10
  • Marzo
    2020

Lo que más me ha impactado es ver cómo por declarar cuarentena en muchas ciudades, principalmente de China, estas se han convertido en ciudades fantasma.

Se pide que nadie salga, pero lo que cierto es que una minoría es la que tiene que obligatoriamente salir a preparar alimentos en pequeños restaurantes, atender locales de conveniencia o farmacias. Aunque China y sus principales ciudades han avanzado mucho en tecnologías aplicadas a la ciudad, a los transportes y a las comunicaciones, es una realidad que falta demasiado por hacer para atender una emergencia de este tipo. Los cyber-robots podrán manejar el metro, pero no pueden preparar comida para alimentar de manera básica a un sector de la ciudad.

Claro que hemos visto en videos en Youtube o Facebook a robots preparando comida, abriendo puertas o actuando como ‘hostess’; pero todo siempre de forma individual, no ha habido, hasta donde he investigado, legiones de robots que salieran a las calles a realizar todas estas actividades al sonar de un comando. Aquí es donde extraño a todas esas fuerzas militares de las películas de la saga Star Wars, esas legiones blancas y negras que desfilan por miles para ir a una guerra intergaláctica.

Otra cosa que me ha impactado es ver el metro, las calles, y las supercarreteras vacías. ¿De qué sirve avanzar como humanidad en todas estas cosas y gastar millones de dólares si una bacteria detiene absolutamente todo y no se puede combatir hasta hoy? Hay algunos sistemas autónomos en el metro y tren bala de China que son operados por robots, pero no todo tiene sistematización. ¿Será que esto nos pone a pensar en que todo lo que hacemos en actividades rutinarias debe ser pensado tanto por el lado “humano” como por el lado “robotizado”?

También los edificios corporativos, aeropuertos y grandes centros comerciales se llevan una tarea importante: el pensar en sistemas paralelos de desinfección, control y monitoreo de enfermedades. Y no solo porque sea este caso de COVID-19, sino hasta para enfermedades respiratorias más comunes como influenzas, neumonías o gripes. Es increíble ver el grado de despreocupación de las empresas al ver a muchos de sus empleados enfermos (principalmente en épocas invernales) y no tener sistemas de purificación de aire en sus oficinas, el de una revisión de rayos calóricos para detectar fiebres o simplemente campañas de cuidado con tapabocas y uso de desinfectante.

La realidad es que como humanidad nos falta mucho por ver, analizar, cuidar y proponer. Que esto nos sirva a todos para seguir viendo lo frágiles que somos ante el dinero, el poder y la tecnología.

Por: Alejandra Gálvez

Facebook / Instagram: @AAI México


Comentarios

publicidad
×