La medusa inmortal: la nueva cura contra el cáncer

Las medusas son animales pertenecientes al mar y que se caracterizan por tener forma de campana con tentáculos colgantes que sirven para capturar a sus presas y sus picaduras pueden provocar ardor, dolor y hormigueo fuerte que suele desaparecer en cuestión de horas pero algunas picaduras pueden ser mortales.

A pesar de llegar a considerarse como animales peligrosos, su poder es mucho más importante, pues recientemente se han realizado estudios acerca de las propiedades genéticas de la especie Turritopsis dohrnii y de su hermana Turritopsis rubra.

Según lo publicado por la revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), dicha especie es especial y diferente al resto por su capacidad de revertir el envejecimiento y extender su ciclo de vida a pesar de que lo natural es que con el paso del tiempo cualquier organismo se aproxime más a la muerte. En este caso, cuando el fin de su vida se ve más cercano comienzan un proceso de regeneración celular que provoca el efecto inverso al esperado: ir rejuveneciendo.

En su cuenta de Twitter, la revista compartió una imagen acerca de como funciona el sistema de esta medusa que se considera biológicamente inmortal.

Las investigaciones han permitido conocer que los genes de las medusas están asociados a la replicación y reparación del ADN, la renovación de la población de las células madre, la comunicación intercelular y la reducción del ambiente celular oxidativo que podría ayudar en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas, cardiovasculares e incluso el cáncer.

El descubrimiento de este genoma en la medusa da esperanza a las víctimas del cáncer sobre un nuevo tratamiento y mucho más efectivo pero también hay quienes buscan que dicho genoma sea usado para encontrar la famosa "fórmula de la inmortalidad"; lo cierto es que de aprobarse sus beneficios en la salud, podría revolucionar la genética médica.

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