Salud

Todo sobre los primeros dientes

Alrededor de los seis meses de edad, comienzan a salir los dientes al bebé, esta primera dentición puede ocasionar una serie de trastornos que no revisten grave


  • 20
  • Mayo
    2022

La salida de los primeros dientes del bebé, o dientes primarios, suele ser un verdadero dolor de cabeza para los padres, sobre todo si son primerizos y desconocen cómo abordar esta etapa del desarrollo infantil.

En este proceso, el bebé se muestra irritable e incómodo y suele llorar sin que nada lo calme, porque el llanto es la única manera en que puede comunicar que le ocurre algo. Esto tiene el inconveniente añadido de que los síntomas que se asocian a la erupción de los dientes en las encías también pueden estar relacionados con otras situaciones, como que el bebé no quiera comer o dormir o que se despierte a menudo llorando.

Todo ello causa intranquilidad y angustia en los padres, que a veces ignoran cuáles son los signos certeros de que un diente está erupcionando. La erupción de los dientes produce dolor de encías en el bebé, por lo cual es lógico que llore y se comporte con irritabilidad.

Sin embargo, la salivación excesiva o ‘babeo’ es lo que realmente puede poner a los padres sobre la pista de que su hija o hijo está experimentando su primera dentición. Otro signo inequívoco de que afloran los primeros dientes es que “el bebé muerde todo”, hasta el punto de que se lleva continuamente las manos a la boca, ejerciendo presión sobre la encía, lo cual le produce cierto alivio temporal.

Ante la presencia de estos indicios los padres deben explorar las encías del bebé y comprobar si están enrojecidas o inflamadas o si en su parte superior se aprecia un pequeño punto blanco y duro. Todo ello les permitirá confirmar que un diente está erupcionando y va a salir.

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Consejos para padres

  • Para aliviar el dolor: El uso de mordederas y/o anillos de dentición, puede aliviar el dolor bucal del bebé, además de distraerlo. Estos elementos se deben esterilizar antes de utilizarlos, y pueden enfriarse en el refrigerador, lo que ayuda a calmar aún más sus encías, pero nunca hay que colocarlos en el congelador.
  • Geles dentales: A menudo contienen un anestésico local que ayuda a adormecer el dolor, se podrían usar en niños mayores de cuatro meses de edad, consultando previamente con un profesional.
  • Analgésicos: Estos medicamentos para niños, que carecen de azúcar y contienen una pequeña cantidad de ibuprofeno o paracetamol, podrían ser una opción si el bebé tiene mucho dolor y fiebre, pero siempre hay que consultar con el pediatra .

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