Perú ya sabe lo que es ganar en Brasil

El ‘Maracanazo’ cambió al futbol brasileño. Tan grande fue el golpe (Uruguay 2-1, en Brasil 1950) que convirtió a esa selección que de forma tímida había intentado alguna vez pelear por la supremacía continental con Argentina y Uruguay en el gigante mundial de hoy.

Después de aquella derrota aleccionadora en su Mundial, Brasil sólo perdió tres partidos oficiales como local. Tres partidos en 69 años. No hay ningún otro caso ni similar en el mundo. Y contra eso se enfrentará Perú en la Gran Final de la Copa América de esta tarde, precisamente en el Maracaná.

Las dos últimas derrotas de la ‘Verdeamarela’ en casa son fáciles de recordar: el 7-1 contra Alemania en el Mineirao de Belo Horizonte y el 3-0 contra Holanda en el Arena Corinthians. Ambas por la Copa del Mundo 2014, en ‘Semis’ y en el duelo por el tercer puesto.

La caída frente a los alemanes también marcó una bisagra en la manera de entender el balompié de los brasileños. Dejaron de autopercibirse como los ‘mais grandes do mundo’ y se inauguró una era más modesta, más humilde. “Es una Final muy difícil”, repiten en las calles de Rio. Y de verdad lo creen.

Quizás, aquellos que repiten esas palabras no saben que Perú es el tercer seleccionado que les ganó un juego oficial en su propio hogar después de 1950. El único sudamericano.

Fue por la edición de 1975 de la Copa América. El formato de la competencia fue diferente al actual. Nueve selecciones se dividieron en tres grupos de tres y el Campeón reinante, Uruguay, se clasificó directo a las Semifinales. El torneo se disputó en sedes de todo el continente y Perú, Brasil y Colombia lograron los pasajes a las Semifinales.

La ‘Blanquirroja’ tenía uno de los mejores planteles de su historia. Aunque venía de no jugar el Mundial 1974, contaba con una mezcla de la generación de 1970 con la de 1978. Héctor Chumpitaz, Oswaldo Ramírez, Teófilo Cubillas, Percy Rojas, Hugo Sotil, César Cueto y Juan Carlos Oblitas, entre otros, formaron parte de aquel plantel que superó a Chile y Bolivia en la primera ronda. Sí, los dos rivales a los que derrotó en esta edición.

Las Semifinales cruzaron a Uruguay con Colombia y a Brasil con Perú. El partido de Ida se disputó en el Mineirao de Belo Horizonte. El visitante salió a la cancha con Sartor; Soria (ingresó Navarro), Meléndez, Chumpitaz, Díaz, Quesada, Ojeda, Cubillas; Ramírez, Casaretto y Oblitas. El local, ya sin ninguno de los ‘cracks’ de 1970, alineó a Nelinho, Miguel, Piazza, Getulio, Vanderley, Gerardo (entró Zé Carlos), Panhinda; Roberto Batata, Roberto (Rainaldo) y Romeu.

A los 19 minutos, Enrique Casaretto abrió el marcador con un disparo cruzado. El ‘Scratch’ tardó en reaccionar pero lo hizo a los cinco de la segunda parte, cuando Roberto Batata anotó el empate. El 1-1 parecía inamovible cuando Cubillas disparó un tiro libre de forma impecable y, a nueve minutos del final, puso a Perú arriba 2-1. Antes del final del encuentro, otra vez Casaretto aprovechó un contragolpe y puso cifras definitivas: 3-1 para Perú como visitante. Ese gol le sirvió a Perú para clasificar a la Gran Final, ya que perdió 2-0 en Lima y logró el pasaje por sorteo. Finalmente, conseguiría su segundo título del certamen ante Colombia.

“Siempre confié en la victoria peruana, salimos a buscarla porque en nuestra patria tenemos jugadores de gran clase, igual que en cualquier parte del mundo. Muy buen rival, lo que amerita más el triunfo”, afirmó Cubillas tras el partido según recuerda el diario ‘El Comercio’.

El goleador, por su parte, declaró: “Jugando al lado de Teófilo todo resulta más fácil, este ha sido el mejor partido de toda mi vida y lo dedico a quienes tuvieron confianza en mi persona y a toda la afición peruana”.

En 69 años, la selección brasileña disputó más de ochenta partidos entre Copa América, Copa Confederaciones, Mundial y Eliminatorias. Sólo perdió tres, uno de ellos ante el mismo rival que irá por el batacazo este domingo en el Maracaná, la tierra donde se llevó a cabo la hazaña más grande de la historia del futbol. (Con información de ESPN.com.mx)

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