Posee un diseño innovador y caprichoso, como ¡de ciencia ficción!
La Starburst House, es un proyecto realizado a petición de un productor de Hollywood, está instalado en el desierto, y conformado por contenedores metálicos
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Mayo
2025
Posee un diseño innovador y caprichoso.
La Starburst House, es un proyecto realizado a petición de un productor de Hollywood, está instalado en el desierto, y conformado por contenedores metálicos.
Hace unos años, el arquitecto británico James Whitaker diseñó una oficina hecha de contenedores metálicos que podía ser transportada, los contenedores estaban unidos por uno de sus extremos en un punto central, y con el otro extremo apuntando en distintas direcciones.
Esta edificación, inspirada en un cristal y con el sorprendente aspecto de una estrella blanca, originalmente estaba pensada para una ciudad de Alemania, no se concretó en el momento, pero después de muchos años llegó a una zona desértica de Estados Unidos.
A comienzos de 2018, un productor de cine de Los Ángeles, California, descubrió la oficina diseñada por Whitaker, y encargó al arquitecto el proyecto para una casa, dentro de una extensa parcela de la población californiana de Joshua Tree.
“Mi cliente en Los Ángeles recibió la visita de algunos amigos, como tenían un poco de tiempo libre, se fueron todos juntos en un viaje por carretera para visitar el terreno de este productor de cine en Joshua Tree”, señala Whitaker.
“Entre el paisaje árido y rocas sobresalientes, uno de los visitantes dijo: ‘Sabes lo que quedaría genial en este lugar?’ y a continuación abrió su computadora para mostrarle una imagen que había visto en Internet”, recuerda Whitaker.
Aquella foto era de la oficina proyectada por el arquitecto para construirse en Alemania. Pocas semanas después, el productor americano se reunió en Londres con el autor del proyecto, para poner en marcha la construcción que lleva por nombre Starburst House.
Aislamiento de alto rendimiento
Los escépticos podrían preguntarse cómo se comporta un racimo de contenedores metálicos en el clima del desierto, y sobre los efectos del calor, pero Whitaker despeja las dudas sobre este punto, al explicar las medidas que se tomaron para refrescar la casa.
“En esta vivienda se reduce la ganancia o acumulación de calor, pintando su exterior con una pintura de color claro, que refleja la luz solar, y utilizando un aislamiento de alto rendimiento”, señaló el arquitecto.
“Las ventanas en la parte superior del proyecto se abren, para permitir que el aire caliente salga de forma natural y, además, está el aire acondicionado, alimentado por la electricidad generada por paneles fotovoltaicos”, añade Whitaker.
El proyecto a detalle
Con un diseño ligeramente diferente del proyecto original, la casa se sitúa en la superficie levemente inclinada de la ladera de una montaña, en una zona donde las aguas pluviales han creado un pequeño barranco en el paisaje.
La casa tiene una superficie de 200 metros cuadrados, repartido en tres habitaciones con baño propio, una cocina, una sala de estar y un exoesqueleto (estructura exterior), formada de contenedores para el transporte de mercancías.
Cada uno de los contenedores está orientado para maximizar las vistas del entorno natural y, al mismo tiempo, aprovechar la topografía del terreno para proporcionar a los ocupantes de la vivienda distintos grados de privacidad, dependiendo del uso individual de cada habitación, detalló el arquitecto británico James Whitaker.
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