Cuando desistir es un acto de autoconocimiento: el caso de la gimnasta Simone Biles

Algunas personas se rehúsan a darse por vencido por miedo a mostrarse como alguien con falta de voluntad o cobardía, cuando en realidad puede ser un acto de gran valentía y autoconocimiento, explican expertos en salud mental.

Durante los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 el caso de la gimnasta Simone Biles sirvió como lección y reflexión sobre la importancia de la salud mental en los distintos aspectos de la vida.

Simone Biles, la estrella del equipo de gimnastas de Estados Unidos, renunció a competir en la final individual de gimnasia artística, argumentando que se encontraba bajo mucha presión.

En una entrevista para el diario estadounidense The Washington Post, Biles explicó que padeció de ‘"twisties", un término bastante conocido en el mundo de la gimnasia para decir que se tuvo un "presentimiento aterrador".

Los gimnastas explican que padecer ese "giro inesperado" es como perder el control de sus cuerpos mientras caen libremente en el aire, a veces se tuercen sin haberlo planeado y otras veces se detienen a mitad de camino como lo hizo Biles.

Una vez que el atleta experimenta esa desorientación en sus acrobacias es muy difícil que lo olvide, ya que se pudo haber sufrido una lesión física importante, más aún en este deporte extremadamente peligroso para el cuerpo humano.

Biles ha logrado ejecutar las piruetas más difíciles en el mundo de la gimnasia, para las cuales se requiere una consciencia corporal al 100 o hasta el 120 por ciento, de lo contrario puede haber severas consecuencias; pero en la máxima justa olímpica de 2021 ha declarado que el estrés no le permitió estar en su mejor momento.

Cuando desistir es un acto de autoconocimiento

Psicólogos en el mundo emitieron su opinión respecto al caso de Simone Biles, a quien describieron como valiente por reconocer y exponer sus límites, considerando que su decisión pudo haber estado motivada por factores relacionados con el estrés, pero también por el autoconocimiento.

Los expertos en salud mental aconsejan que se debe aprender a renunciar, porque prepararse y tener un enfoque está bien, pero en algún momento todo puede ser diferente, teniendo que tomar una pausa y preguntarse: ¿por qué tengo que pasar por todo esto? Y, sobre todo, ¿por quién?

Los seres humanos relacionan el acto de desistir con el fracaso porque piensan que decepcionarán a más personas o porque pasan todo el tiempo tratando de cumplir con las expectativas de la familia, los amigos o la pareja.

Lo que hizo la gimnasta estadounidense es una lección para muchos en el mundo, y un llamado para prestar mayor atención a la salud mental y física.

Buscar atención profesional siempre será lo más adecuado, así como conversar con seres queridos, practicar ejercicio y hacer actividades placenteras que ayuden a aliviar el sufrimiento.

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