Estos son los dioses prehispánicos más aterradores

El México prehispánico era politeísta, es decir, nuestros antepasados rendían culto a varias deidades de distintas formas.Se creía que estos dioses tenían poder incluso sobre los fenómenos naturales y algunos eran tan aterradores tanto por su culto como por su presentación. Aquí te presentamos tres de los más temidos.1. TezcatlipocaEs la personificación de la fatalidad. De acuerdo con el libro El Pueblo del Sol de Alfonso Caso, su nombre originalmente significa 'cielo nocturno' y está conectado con todos los dioses estelares, incluyendo los de la muerte, la maldad y la destrucción.Su peligro radica en que es un dios muy voluble que puede hacer a los humanos caer en la desgracia a su antojo. Su nombre también significa “el espejo que humea”, debido a que en lugar de su pie izquierdo tiene un espejo que te muestra tu inminente destino.Fray Bernardino de Sahagún lo describe como un gigante que se aparecía por las noches con un hacha para aterrorizar a los mexicanos.2. Xipe TótecAunque no es meramente un dios malo, su forma de culto puede llegar a espantar a muchos en la actualidad.Además de ser el dios de las cosechas, también es uno de los patronos de la guerra.Su rito consistía en el degollamiento de personas, pues según la leyenda, él mismo se despellejó vivo para darle de comer por primera vez a los hombres. En su fiesta se comía carne humana y el sacerdote se metía en la piel del guerrero muerto para bailar en una ceremonia.3. CihuateteoSe le denominaba así a las mujeres muertas durante el primer parto que cual guerreros que morían en la batalla, eran recogidas por la Ciuhcóatl (la recolectora de almas) y enviadas al Mictlán. Según los códices, una vez Moctezuma escuchó el llanto de una mujer por los caminos de Tenochtitlán:“¡Ay, mis hijos! ¿A dónde los llevaré?'.Tiempo después tras la conquista española, esta alma resultó ser la representación de la Llorona.Se creía que las Chihuateteo podían aparecer en los cruces de camino, hacían enfermar a los niños y podían tomar el control de sus cuerpos para hacer travesuras.

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