Escena

Damaso Pérez Prado: un siglo a ritmo de mambo

El compositor y arreglista cubano, quien se nacionalizó mexicano, definió las bases de este género musical, con el que creó un vasto legado


  • 10
  • Diciembre
    2016

Lejos de su natal Matanzas, Cuba, el compositor Dámaso Pérez Prado no sólo hizo de México su segunda patria, sino que además le regaló el ritmo del mambo para coronarse como monarca del género musical, derivado del danzón proveniente de la isla. Este domingo se conmemoran 100 años del nacimiento del arreglista y pianista, también apodado Cara e Foca.

Su carrera por la música arrancó a temprana edad en la Academia de Música de María Angulo, en la que aprendió a tocar el piano, habilidad con la que pasó de tocar piezas de música clásica a componer danzones, sones y boleros, con los que se ganó reconocimiento en La Habana al participar en una orquesta de jazz. Sin embargo, su fama llegaría más allá de la isla caribeña.

En México, Pérez Prado ya era figura por sus arreglos como El Caballo y la Montura y Un Meneito, antes de su llegada al país en 1948, al buscar nuevas oportunidades fuera de Cuba. Luego de llegar a tierras mexicanas, se reunió con soneros y timbaleros y grabó los temas Tacuba, El Manisero y uno de sus grandes éxitos ¡Qué Rico Mambo!, con el que se popularizó a finales de 1949.

Su llegada a México también significó su incursión en el plano del cine. Participó en la cinta Coqueta, con su compatriota Ninón Sevilla. Entre sus colaboraciones en la pantalla grande, tanto como músico o actor, se encuentran Al Son del Mambo, Amor Perdido, Las Interesadas y Salón de Baile, mientras que su música apareció en cintas internacionales como Cha-Cha-Cha Boom! de 1956 y La Dolce Vita de 1960 de Federico Fellini.

Pese a su salida de Cuba en la década de los años 50, Pérez Prado logró convertirse en ciudadano mexicano en 1980, y pasó los últimos años de su vida en la capital del país, en la que falleció a los 72 años en 1989, víctima de un paro cardiaco, dejando atrás un vasto legado de grabaciones.

Conoce más sobre El Rey del Mambo

- Pérez Prado realizó un gran número de grabaciones, algunas de las cuales ocurrieron fuera del país, y que han sido localizadas por coleccionistas musicales años después.

- Su conocido grito de “¡Mambo!” surgió como una espontaneidad durante sus primeras grabaciones y no fue del agrado de sus músicos al considerarlo corriente.

- Debido a que su obra fue conocida en todo el mundo, una disquera en Japón le encargó grabar un álbum con su sonido para representar al continente americano.

- Aunque nunca lo confirmó, su salida de México en los años 50 habría ocurrido por realizar una grabación del Himno Nacional a ritmo de mambo.



Comentarios

publicidad
Etiquetas:
×