Tu salud está en tus manos; aprende a autoexplorarte

La autoexploración mamaria o autoexamen de mamas, es un acto de autoconocimiento mamario, funciona para familiarizarse con el aspecto y la sensación habitual de tus mamas, de modo que puedas detectar rápidamente cualquier cambio. 

Aunque su utilidad como herramienta principal de tamizaje es debatida, sigue siendo muy valiosa como complemento de los exámenes clínicos e imagenológicos. (Con información de Agencias)

El paso a paso

Elige el momento adecuado: Preferiblemente, hazla 7 días después de la menstruación (cuando las mamas no estén tensas). Si ya no menstruas, escoge un día fijo cada mes. 

Colócate frente al espejo (inspección visual): De pie con los brazos relajados, observa tus mamas, busca asimetrías, hundimientos, cambios en la piel o retracciones del pezón. Palpación de pie o en la regadera: Con la mano derecha detrás de la nuca, usa la mano izquierda para palpar la mama derecha, cubriendo toda la zona (incluyendo la axila). Luego repite con la otra mama. Presiona suavemente el pezón para verificar si hay secreciones. Palpación acostada: Acuéstate boca arriba con una almohada o toalla bajo el hombro del lado que vas a examinar. Coloca una mano detrás de la cabeza y con la otra palpa toda la mama, siguiendo los mismos movimientos circulares o verticales. Incluye la zona desde la mama hacia la axila. 

Tómalo en cuenta

La autoexploración no sustituye exámenes clínicos ni mamografías; es un complemento para alertarte ante posibles anomalías. 

Lo que debes saber

Exploración clínica de mama: La exploración clínica de mama la realiza un profesional médico entrenado (ginecólogo, mastólogo, oncólogo, médico general con capacitación), para detectar bultos, cambios de textura o hallazgos que la persona no haya percibido.

Mamografía (o mastografía): Es un estudio de imagen con rayos X, diseñado especialmente para detectar anomalías en las mamas. Consiste en comprimir la mama entre dos placas para obtener radiografías del tejido femenino. Busca microcalcificaciones, masas o densidades sospechosas. 

Mamografía diagnóstica: Cuando los hallazgos preliminares (por ejemplo, en tamizaje o por síntomas) requieren un estudio más detallado, se realiza una mamografía diagnóstica. Es más exhaustiva, con más imágenes enfocadas al área sospechosa, a diferentes ángulos, e imágenes ampliadas. 

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