Exige Nahuel acción por grito homofóbico en Aguascalientes

El regreso del grito homofóbico a un estadio de la Liga MX encendió las alarmas este fin de semana, luego de que en los minutos finales del empate sin goles entre Necaxa y Tigres, la afición local profirió el cántico discriminatorio en reiteradas ocasiones contra el portero Nahuel Guzmán.

Pese a ello, el árbitro del encuentro no detuvo el juego ni activó los protocolos establecidos por la Liga y la FIFA.

El incidente ocurrió en el Estadio Victoria, durante el juego de ida de los cuartos de final del Clausura 2025. Aunque el grito fue claramente perceptible, el cuerpo arbitral omitió cualquier tipo de advertencia o pausa en el desarrollo del encuentro, ignorando lo que marcan los lineamientos en materia de conducta antidiscriminatoria.

Tras el silbatazo final, Nahuel Guzmán no dudó en alzar la voz y denunciar la pasividad de las autoridades del futbol mexicano. El arquero argentino calificó el hecho como inadmisible y lamentó que no se esté actuando con la seriedad que el caso amerita.

“Me gustaría denunciar públicamente lo que sucedió. Este grito no puede seguir ocurriendo en nuestros estadios. El protocolo está para cumplirse, y si las autoridades no tienen el carácter de hacerlo valer, entonces estamos fallando todos”, expresó el 'Patón'.

Guzmán pidió coherencia a la Liga MX, a la Federación Mexicana de Futbol (FMF) y a los árbitros, al señalar que ya existe una normativa clara que debe ser aplicada con firmeza, sin importar el estadio o el momento del partido.

“No es algo que me afecte solo a mí. Este tipo de comportamientos dañan al futbol mexicano en su conjunto. Ya no basta con comunicados tibios o campañas simbólicas, hay que actuar con decisión”, agregó.

La Liga MX y la FMF han sido advertidas en múltiples ocasiones por la FIFA, incluso con amenazas de sanciones, multas y veto a estadios, en caso de que el grito persista.

En el pasado, se implementaron protocolos que incluían pausas en el partido, anuncios por altavoz e incluso la suspensión definitiva del encuentro si la conducta no cesaba. Sin embargo, en los últimos torneos, la aplicación de estas medidas ha disminuido de forma considerable.

“Que se respeten las reglas que ellos mismos impusieron. Que tengan el valor de aplicarlas, aunque no sea popular, aunque implique tomar decisiones difíciles. De eso se trata la autoridad”, sentenció Guzmán.

“Entonces, que pongan los huev... sobre la mesa la gente que lo tenga que hacer y tomen las decisiones que tienen que tomar", concluyó.

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