Fallece Manolo ‘el del Bombo’, leyenda de la afición española

Manuel Cáceres Artesero, mundialmente conocido como Manolo "el del Bombo", falleció este jueves a los 76 años, dejando un vacío profundo en el corazón de la afición española. 

Durante más de cuatro décadas, su presencia inconfundible, marcada por su inseparable bombo y su inquebrantable pasión por la selección nacional, fue un símbolo del fútbol español.

La Real Federación Española de Fútbol confirmó la noticia con un mensaje de despedida en redes sociales:

“Ha fallecido uno de nuestros seguidores más fieles, quien siempre nos acompañó en las buenas y en las malas. Sabemos que seguirás haciendo retumbar nuestros corazones. Descansa en paz, Manolo. Nuestro más sentido pésame a sus familiares y amigos”.

🖤 Ha fallecido uno de nuestros seguidores más fieles, quien siempre nos acompañó en las buenas y en las malas.

🥁 Sabemos que seguirás haciendo retumbar nuestros corazones.

Descansa en paz, Manolo.

Nuestro más sentido pésame a sus familiares y amigos. pic.twitter.com/ApPOeQewlP

— Selección Española Masculina de Fútbol (@SEFutbol) May 1, 2025

Más que un aficionado: una institución

Originario de Ciudad Real, Manolo se estableció en la localidad de Moncofar, en la provincia de Castellón, desde donde emprendía viaje a cada rincón del mundo para alentar a la Roja.

Su historia como fanático comenzó en la década de los 80, y desde entonces no faltó a ninguna Copa del Mundo, sumando un total de diez ediciones consecutivas en las gradas, siempre acompañado por su mítico bombo.

Vestido con camisetas personalizadas de España y una gorra de policía nacional, Manolo se convirtió en un personaje entrañable para miles de aficionados, medios de comunicación y hasta para los propios jugadores.

Su última ovación fue en Mestalla

Aunque en los últimos años su salud le impidió seguir el ritmo de antes, Manolo no se alejó por completo del fútbol. Su última aparición como aficionado fue el 23 de marzo de 2024, en el estadio de Mestalla, durante el amistoso entre España y Países Bajos, que terminó en empate 3-3 y se definió por penales.

Ese día, el estadio entero le rindió un homenaje espontáneo. Muchos sabían que podría ser la última vez que verían a Manolo alentar desde las gradas. Y así fue.

Un legado que seguirá retumbando

Manolo "el del Bombo" no fue solo un espectador, sino un símbolo de fidelidad, optimismo y entrega. Su figura trascendió el deporte y se convirtió en parte de la identidad cultural de la afición española.

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