Diagnóstico ocular: Una ventana al cuerpo

La medicina naturista considera al cuerpo humano como un sistema biológico en su totalidad, que en su conjunto puede ser leído a través de sus tejidos, funciones, órganos y aparatos.

Según los naturópatas, al examinar el ojo se descubre en el organismo, desde la actividad y estado de sus órganos, los defectos estructurales y desequilibrios químicos, hasta las debilidades intrínsecas, predisposiciones y tensiones, trastornos endocrinos y lesiones.

Los iris de los ojos izquierdo y derecho de la mujer reflejan respectivamente los factores hereditarios o congénitos procedentes de su madre y su padre; el iris izquierdo del varón refleja sus herencias paternas, y el derecho, las maternas, según afirman.

Para el poeta y dramaturgo alemán Friedrich Hebbel, que vivió entre 1813 y 1863, “los ojos son el punto donde se mezclan alma y cuerpo”. Para la medicina naturista son una auténtica mirilla, a través de la cual se puede observar el organismo humano y conocer tanto su salud, como sus enfermedades.

El diagnóstico ocular se fundamenta en observar, analizar, leer e interpretar los signos, manchas, pigmentos, cambios, señales y alteraciones cromáticas del iris, considerando factores como la uniformidad, coherencia, limpieza, densidad y homogeneidad de su superficie.

“El iris humano es un pequeño mundo de color avellana o azul, que es un fiel reflejo del gran mundo del cuerpo humano”, explica el médico naturópata Javier Griso Salom.

El diagnóstico a través del iris se realiza con la ayuda de aparatos, como lupas, microscopios, linternas y equipos más complejos, mediante los cuales el especialista en este método va detectando la vitalidad y la resistencia, así como los factores hereditarios del paciente.

En base a ello, el terapeuta efectuará una propuesta de reforma de hábitos alimenticios y mejoría de la salud, que puede incluir dietas hipocalóricas y depurativas, así como el consumo de plantas medicinales.

El organismo a la vista

Según los especialistas que siguen esta técnica, al examinar el ojo se descubre en el organismo, desde la actividad y estado de sus órganos y sistemas, los defectos estructurales y desequilibrios químicos, y los estados de envenenamiento o toxicidad, hasta las debilidades intrínsecas, predisposiciones y tensiones, trastornos endocrinos y lesiones.

“También pueden diagnosticarse las inflamaciones, acumulaciones de medicamentos u otros productos químicos, así como un grado de acidez anormal en los tejidos, fluidos u órganos”, detalla el médico naturópata Javier Griso Salom. A decir de sus partidarios, este método natural posibilita un examen no agresivo para el organismo y es un aviso rápido de futuras dolencias.

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