nl_peleas_mty_abbca2f3e8
Nuevo León

Agresividad y peleas ganan terreno en la metrópoli regia

El individualismo, la infraestructura deficiente y la explosión demográfica alimentan fricciones y agresividad entre regios, especialmente en el ámbito vial


  • 30
  • Mayo
    2025

En la urbe regia, cada vez hay más muestras de que la agresividad y la actitud violenta le están ganando terreno a la empatía y tolerancia, pues están creciendo las peleas entre automovilistas, usuarios del transporte público, vecinos y hasta estudiantes.

Es cada vez más común ver a los habitantes del área metropolitana de Monterrey conduciendo sus autos de forma agresiva: impidiendo el paso al de junto, haciendo señas o gritando con malas palabras a otro conductor, o participando en riñas por actos viales.

De acuerdo con datos más recientes del Inegi, los conflictos entre los regios han crecido en 35% por motivos relacionados con la vialidad, el ruido o la generación de basura.

nl-peleas-mty.jpeg

Expertos en sociología dijeron a El Horizonte que esto tiene su origen en cuatro factores que tienen que ver con la parte humana: el primero es el individualismo, es decir, creer que somos más importantes que los demás y, por lo tanto, tenemos que pasar primero para llegar primero.

El segundo es emular el temperamento de líderes “bravucones” que no respetan a los demás como, por ejemplo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump; tercero, la “deshumanización del espacio público”, es decir, que la urbe regia se ha convertido en una ciudad con tanta gente y tantos autos que se pierde la cercanía con las personas y, por lo tanto, la compasión.

Un cuarto factor es que la urbe regia se ha convertido en una “ciudad de carros”, lo que se traduce en distanciamiento de otras personas y los lleva a actuar de una manera violenta que no harían cuando están cara a cara.

Todo esto, dijeron, se traduce en un mayor estrés social; es producto de crecientes problemas emocionales como la depresión o la ansiedad, pero también del creciente tráfico vehicular, la saturación de servicios como el transporte, las vías públicas y la inseguridad.

Un ejemplo palpable de esta creciente situación que sufre la urbe de Monterrey son las golpizas entre automovilistas, que se han vuelto frecuentes, pero no dejan de ser perturbadoras: por motivos como un “cerrón” involuntario o no haber cedido el paso, los automovilistas o choferes se lían a golpes frente a todo mundo.

nl-peleas-mty.jpeg

Aunque todavía no hay mediciones, expertos afirman que este último fenómeno va en aumento. Un recuento periodístico arroja que, en lo que va del año, son por lo menos ocho las peleas que se han viralizado en medios de comunicación y redes sociales, aparte de las que no se publican. 

También son cada vez más comunes las peleas arriba de los camiones, entre pasajeros o de estos contra los choferes, así como de estudiantes que pelean dentro de escuelas, azuzados por sus compañeros.

La Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del INEGI revela que en los últimos dos años, la totalidad de conflictos entre los regios pasaron de 715,949 en 2022 a 973,788 en 2024, lo que es un 36% de incremento.   En el último año, el incremento fue del 16%, al pasar de 820,346 a 973,200 en 2024.

Luisa Peresbarbosa, directora de Movimiento de Activación (Movac), dijo que, en el caso de las peleas entre conductores, tienen que ver con la falta de una cultura de respeto a los demás, pero también con “externalidades” como una infraestructura vial cada vez más ineficiente.

“El problema se debe a varios factores: uno es que nunca se nos ha enseñado cómo convivir en el espacio público y que tengamos estas sensibilizaciones, este conocimiento de respeto hacia todos los usuarios y el cómo funciona la vialidad, o sea, sí es por una ausencia de una educación formal, de educación vial.

“Dos, que las calles, la infraestructura es deficiente, está mal, o sea, no está bien señalizada; entonces, si hay zonas donde realmente te tienes que meter, porque, pues no está la calle bien hecha”, sostuvo.

Otros expertos afirman que la idiosincrasia “entrona” del regio, mezclada con la de personas que vienen de otros estados a vivir, provoca un “choque cultural” que deriva en fricciones.

nl-peleas-mty.jpeg

En entrevista con El Horizonte, Jose Guadalupe Steele Garza, titular del Centro de Mediación y Litigación de la Facultad de Derecho y Criminología de la UANL, afirmó que hay dos detonantes importantes para este nuevo comportamiento agresivo en las actividades diarias: la explosión demográfica de la región y la existencia de más estrés en la ciudadanía.

La explosión demográfica que se tiene en nuestro estado, el ingreso de otras personas de otros estados, la migración y con otras costumbres distintas a las que nosotros comúnmente teníamos en el siglo XX y donde había una comunión.

“Y otra de ellas es el estrés, el estrés que equivale al sufrimiento de las personas, las depresiones, las ansiedades, muchos miedos, muchos temores, mucha defensiva y, obviamente, se ha estado perdiendo la cortesía entre las personas, el respeto y, en contrario, nos encontramos con antivalores como es la prepotencia, la arrogancia y la soberbia”, comentó Steele Garza.

Botones de muestra

Con el avance de la tecnología, las personas pueden captar y hacer públicos videos que evidencian el comportamiento errático que algunos ciudadanos llevan al punto de los golpes o diversos grados de violencia.

Tan solo en lo que va del año, El Horizonte ha contabilizado, a través de un análisis periodístico, un total de ocho peleas que iniciaron por algún conflicto vial o alguna confusión en el transporte público.

Entre estos destacó el más reciente, ocurrido el pasado 6 de mayo, cuando un pasajero agredió al chofer de un camión urbano por no poder pagar con efectivo, al grado de escalar violencia, hasta apuñalarlo en repetidas ocasiones con un desarmador.

chofer-ruta-20.jpg

Steele Garza explicó que es importante contener esas emociones, ya que, de lo contrario, se cae en una serie de consecuencias violentas que muchas veces requieren tomarse un momento y respirar.

También informó que es importante preocuparse por la salud mental y dejar atrás los prejuicios o estigmas de acudir a un especialista, para poder recibir la ayuda necesaria y evitar que la cadena de violencia siga creciendo. 

“Todo lo que hagas trae una consecuencia, y a veces generamos una acción violenta sin saber las consecuencias, sin detenernos a reflexionar las consecuencias. Muchos conflictos de la comunidad, muchos conflictos del tráfico, de la escuela, de los vecinos, se han convertido en delitos por una situación de esa falta de empatía con las personas.

“Cuando te pones en la situación de ese tipo, hay que contar hasta diez para poder contenerte, y ese conteo hasta diez es la oxigenación mental. Y, por eso, cuando hablamos de la salud mental de las personas, a veces nuestros prejuicios no nos permiten ir con los especialistas porque pensamos que no podemos solucionarlo”, agregó Steele Garza.

Sigue estos y más contenidos exclusivos completamente gratis en nuestros servicios digitales de noticias por:

  •  WhatsApp - Únete aquí
  • Newsletter - Suscríbete aquí

Comentarios

publicidad
×