¿Qué comidas evitar y cuáles consumir por la colitis?

La colitis o inflamación del colon es un padecimiento muy frecuente en el que la persona presenta un dolor agudo en la zona abdominal, derivado de muchos factores, entre los que se puede encontrar una mala alimentación, situaciones de estrés o infecciones bacterianas que no han sido tratadas de manera adecuada. Estos síntomas resultan molestos e interfieren de manera directa con el bienestar de la persona.

El mejor tratamiento para disminuir los síntomas de la colitis es mantener unos hábitos de vida saludables, tanto en la alimentación como realizando ejercicio con frecuencia.

Los alimentos para el colon irritable deben ser bien elegidos, integrando aquellos que contengan fibra y eliminando por completo los que puedan resultar irritantes, ya que pueden desencadenar o agravar los problemas.

Con la intención de ayudar a tu sistema digestivo, aquí te compartimos algunas sugerencias de alimentación. (Con información de Agencias)

Aléjate de:

? Los lácteos: Estos pueden aumentar la acumulación de gases. En el caso de que aún se deseen consumirse, se puede optar por los productos sin lactosa, ya que ésta es la principal responsable de la aparición de esos síntomas.

? Alimentos condimentados: Evita consumir platillos demasiado condimentados, bebidas con cafeína y gaseosas. Estos alimentos desencadenan los síntomas, además de que provocan mayor inflamación de la zona abdominal.

? Comida chatarra: No sólo no te ofrece nutrientes, sino que además contiene grandes cantidades de grasa saturada y es más difícil de digerir para el organismo, lo que aumenta el aparecimiento de los síntomas.

Puedes consumir:

? Carne: Debe estar bien cocida y procurar que ésta sea magra. Es preferible en estos casos consumir pollo o pescados, aunque éstos deberán también estar perfectamente cocidos. Se deben evitar siempre las grasas, debido a que su ingesta empeora los síntomas del síndrome de intestino irritable.

? Frutas y verduras: Particularmente aquellas que te ofrezcan fibra. Las frutas que se pueden comer con cáscara, como la manzana o la pera, tienen gran contenido de fibra; el kiwi es también una fuente importante de fibra para el organismo, y verduras como la zanahoria, la cual además tiene propiedades antiinflamatorias.

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