Reconocen impacto de aranceles en la inflación de Estados Unidos

El presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, afirmó que la inflación comenzó a repuntar en Estados Unidos debido en “una buena parte” a los aranceles decretados por el presidente Donald Trump. 

"Claramente algo de ella (de la inflación), buena parte de ella, proviene de los aranceles", sostuvo el funcionario estadounidense.

Añadió que el efecto inflacionario podría seguir aumentando a lo largo del año.

El panorama económico también se ve afectado por las medidas comerciales del presidente Donald Trump, quien anunció que a partir del 2 de abril aplicará aranceles recíprocos contra países que -según su administración- practican políticas desleales. 

Estas restricciones han elevado las expectativas de inflación y generado volatilidad en los mercados. 

“Sigue siendo cierto que si hay un impulso inflacionario que desaparece por sí solo, endurecer la política monetaria no es la política correcta. Porque para cuando se produce el efecto, ya se está, en efecto, intencionalmente, reduciendo la actividad económica y el empleo”, dijo Powell este miércoles.

Como se recordará, el domingo pasado, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, advirtió que Estados Unidos podría entrar en recesión, aunque calificó de "saludables" las correcciones en la bolsa. 

En este mismo tema, Powell consideró que la posibilidad de una recesión ha aumentado en Estados Unidos, aunque el riesgo no es alto, en medio de inquietudes por las políticas económicas del presidente Donald Trump. 

"Si retrocedemos dos meses, la gente decía que la probabilidad de una recesión era extremadamente baja".

"Así que ha aumentado, pero no es alta", declaró en conferencia tras el anuncio sobre las tasas de interés. 

Precisó que la incertidumbre es “inusualmente alta” debido a las condiciones actuales del mercado y por ello también se ajustó a la baja la proyección del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos para este año.

Y es que la Fed ajustó a la baja sus previsiones económicas para 2025, reduciendo la estimación de crecimiento del PIB a 1.7%, colocándola por debajo del 2.7% proyectado anteriormente.

En cuanto a la inflación, la previsión subió a 2.7%, frente al 2.5% estimado en la última reunión. La tasa de desempleo también se revisó al alza, pasando del 4.3% al 4.4%.

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