¿Conoces los síntomas de la apendicitis?
Es una enfermedad extremadamente común, que acomete a cerca del 7% de la población, lo que la hace una de las principales emergencias médicas en todo el mundo
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Noviembre
2016
Aunque es una afección que puede resolverse con una rápida intervención quirúrgica, la apendicitis continúa ocasionando muertes cuando no se acude a tiempo a un centro de salud y desencadena en una peligrosa peritonitis.
Es importante saber diferenciar bien una apendicitis de cualquier otro dolor estomacal y pasar a una revisión médica; pues entre el chequeo y todas las pruebas que ordena el doctor podrían pasar más de cuatro horas para un diagnóstico definitivo y la apendicitis puede agravarse.
Aquí te compartimos información relevante para detectar esta enfermedad. (Con información de Agencias)
Señales de alerta
* Dolor abdominal
* Rigidez de la pared del abdomen
* Mareos
* Vómitos
* Pérdida del apetito
* Fiebre
* Diarrea
* Estreñimiento
* Distensión abdominal
* Leucocitosis (aumento del número de leucocitos en el hemograma)
¡CUIDADO!
Si no se acude a tiempo para un diagnóstico, el apéndice, que es el órgano del tamaño de un dedo que está adosado al intestino grueso en la parte inferior derecha del abdomen, puede reventarse e infectar a todo el organismo con las bacterias y materia fecal que podría haber estado en su interior. Esto se conoce como peritonitis.
Detección
Generalmente comienza con un dolor abdominal alrededor del ombligo, el cual se va incrementando gradualmente hasta desplazarse a la zona derecha del abdomen. La persona que lo padece siente deseos de orinar urgentemente, en un número anormal de veces. Y en casos donde los afectados son niños pequeños, los síntomas más frecuentes son vómitos y un abdomen hinchado, además del intenso dolor, que en ocasiones puede ser intermitente hasta volverse más agudo y persistente.
Prevención
Es importante llevar una dieta alimenticia lo más saludable posible, rica en fibras, que son las que posibilitan un mayor movimiento de las heces.
Por otra parte, existen algunas posturas no comprobadas que señalan que la ingesta de semillas debe limitarse ya que pueden obstruir la irrigación del apéndice.
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