¿Qué es la megarexia?

Los trastornos alimenticios cada vez son más frecuentes en las personas. La obsesión por tener unos kilos de menos hace que se empiecen a adoptar hábitos que son perjudiciales para la salud ocasionando anorexia o bulimia.

Sin embargo, existe un nuevo trastorno llamado: megarexia y es adoptada por aquellos que consideran que su peso es el adecuado, convencidos de que tienen una figura perfecta, cuando su realidad inmediata es la obesidad. Los especialistas calculan que por cada anoréxico, hay diez megaréxicos, una cifra escalofriante considerando lo peligrosa que puede ser la obesidad.

Estas personas confunden su peso con la definición de masa muscular, produciendo en ellos una negación de practicar actividades físicas y tener una alimentación balanceada. Estos factores hacen que quienes padecen este trastorno, aumenten su consumo de grasas y calorías, teniendo la falsa idea de que su peso se mantendrá.

¿CÓMO IDENTIFICARLOS?

• Su percepción de la realidad está completamente alterada, pues siendo obeso considera que luce muy bien y es absolutamente atractivo
• No es capaz de asumir que es víctima de una enfermedad
• Sus hábitos de vida son poco saludables, come en exceso, especialmente alimentos altamente calóricos y lleva una vida sedentaria
• Evitan fotografiar su cuerpo, porque teme profundamente enfrentar su verdadera imagen
• Tampoco le gusta probarse prendas de vestir al ir de compras. Un pantalón de tamaño descomunal suele ser el detonante de una fuerte depresión
• Es generalmente hostil, intransigente y conflictivo
• Manifiestan un fuerte desprecio por todo lo que rodea, e incluso, por sí mismo
• Utiliza ropa de talla más grande, pensando que se encuentra por debajo de su peso ideal
• Cree que las básculas están siempre están dañadas, o con aumento de libras, para confundirlos

¡AYÚDALOS!

Como ocurre con todos los trastornos alimentarios de origen psicológico, el paso inicial para superar la megarexia es aceptar que el problema existe y que no se trata tan sólo de un asunto de sobrepeso

Requiere de mucho apoyo, seguimiento y comprensión. En este sentido, el entorno familiar tiene un papel fundamental para ayudar al megaréxico a verse como realmente es: una persona enferma y no simplemente alguien con un apetito voraz. Asimismo, es indispensable la asesoría de un equipo profesional que incluya especialistas en materia clínica, psicológica y nutricional

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